La neofilia es la afición y el gusto desmedido por las cosas nuevas y por la novedad. Se manifiesta como un deseo hacia lo nuevo por el mero hecho de ser nuevo. Aunque no hay nada malo en sentir atracción por la novedad, el amor por lo nuevo y el estímulo que producen las cosas nuevas se encuentra en los fundamentos del consumismo. La búsqueda desesperada de cosas nuevas también puede llegar convertirse en un verdadero trastorno que merma la capacidad económica de la persona, en la medida que afecta a su juicio sobre lo que verdaderamente necesita y lo que no.
La neofobia es el miedo persistente, anormal e injustificado hacia las cosas y las experiencias que son nuevas. A veces es posibe asociar el enojo hacia el cambio con la falta de curiosidad y de interés explorador. También lo podemos encontrar en determinadas posiciones conservadoras, reaccionarias o tecnófobas. El rechazo hacia lo nuevo también puede alcanzar la categoría de transtorno en la medida que puede adoptar la forma de miedo mental y repulsivo hacia cualquier forma de novedad o cambio.
La novedad y el cambio no nos dejan indiferentes. Pueden ejercer fascinación y atracción, pero también miedo y rechazo. Los sentimientos que generan pueden ser extremadamente sutiles pero también disparar emociones tan intensas que nos pueden hacer perder la cabeza. Y usted ¿qué relación mantiene con el cambio?