Aquel viejo partido rejuvenecido que alcanzó el poder en 1982 no parece tener ni diez justos entre sus 193.989 militantes, pues ha tenido que traerse una diputada tránsfuga de UPyD, Irene Lozano, para encargarle que lo regenere de “la corrupción siciliana” que ella denunciaba.
Ni diez justos encontró Abraham en Sodoma para evitar la destrucción que Yahvé le anunciaba por sus horribles pecados.
De los habitantes de la ciudad sólo se salvaron Lot y parte de su familia. Su mujer, además, quedó ciega por mirar atrás para ver como caía fuego y muerte desde el cielo.
El PSOE no tiene diez justos, ni siquiera un Lot, aunque con menos de 200.000 militantes se ha quedado muy corto desde los 700.000 que declaraba tener en la era dorada de Felipe González.
Sólo un partido desorientado y perdido puede integrar a un enemigo arribista en sus filas. Le pasó al mismo González cuando fichó al juez Baltasar Garzón... PULSE ABAJO PARA LEER LA CRÓNICA COMPLETA Y VER A SALAS...