No se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, y ese es el problema del BDS, que se le acaba el tiempo.
Poco a poco Ayuntamientos, Regiones, Estados, etc, etc, van dando la espalda al mensaje de odio del BDS.
Y es que se les ve el plumero, su “lucha” no tiene nada que ver con los derechos de los palestinos, ni la ocupación sino con la mera existencia de Israel.
Ese es su verdadero, e inconfeso, objetivo.
Ahora, en Norteamérica, la región de Niágara condena al BDS, y eso es algo que hay que celebrar e informar.
Fuente: Niagarathisweek