A principios de este año, Nikon decidió sorprendernos con su nuevo modelo Coolpix S6800, una cámara apta para todos los usuarios con características que vamos a desglosar a continuación.
Características técnicas de la Nikon Coolpix S6800
Vamos a empezar a destripar la Nikon Coolpix S6800 conociendo algunas de sus características técnicas principales, empezando por su sensor de imagen, que no es otro que un CMOS, consiguiendo una resolución máxima de 16,8 MP, siendo su resolución efectiva de 16 MP.
Gracias a su filtro de color RGB podremos conseguir unos colores fantásticos y adaptados a nuestro ojo a la perfección.
Pantalla, Flash e ISO
Cuenta con una pantalla trasera TFT de 3 pulgadas y con una resolución de 460.000 píxeles, permitiendo la visualización de las capturas antes y después de ser realizadas porque, no olvidemos que no dispone de visor, por lo que será necesario hacer uso de este sistema para poder conseguir imágenes perfectamente encuadradas.
Dispone por supuesto de flash incorporado y para controlar la exposición dispondremos de un modo automático con la posibilidad de elegir entre 18 escenas distintas.
En cuanto a su sensibilidad, tenemos la posibilidad de utilizar entre 125 ISO y 6.400 ISO, optando a la vez por utilizar medición matricial, puntual o ponderada al centro.
Finalmente, su balance de blancos es automático y preconfigurado.
Óptica de la Nikon Coolpix S6800
Este modelo cuenta con una óptica Nikkor que permite una distancia focal digital de 4,5 hasta 54 mm, lo equivalente en 35 mm a 25 a 300 mm. Su zoom digital nos permite hasta 4x, mientras que su zoom óptico asciende hasta los 12 aumentos (12x).
Además, nos ofrece la posibilidad de utilizar enfoque automático o manual, y dispone también de luz de ayuda al autofoco.
Resoluciones de disparo y vídeo
También contamos con un abanico bastante interesantes de resolución, y es que en disparo simple podemos disponer de un total de siete resoluciones distintas, empezando por 640 x 480 como mínima resolución y alcanzando hasta los 4608 x 3456 píxeles como tope. El formato de almacenamiento se realizará en JPEG.
Pasamos ahora al disparo en ráfaga, donde encontramos cinco posibilidades, El formato principal que podremos utilizar es de 4608 x 3456, pero con la opción de elegir 11 fps con 5 imágenes, 9,4 fps con 7 imágenes o 2 fps también con 7 imágenes. A su vez, si necesitamos más imágenes por segundo, podremos optar por 60 fps con 25 imágenes y hasta 120 fps con 50 imágenes.
También tendremos la posibilidad de grabar vídeo en un total de siete formatos que son 320 x 240 a 30 fps el más sencillo, 640 x 480 a 25 ó 30 fps, 1280 x 720 (HD 720p) a 25 ó 30 fps, y finalmente 1920 x 1080 (FullHD 1080p) a elegir también entre 20 y 30 fps. En cuanto al almacenamiento, se realizará en MOV mediante un formato de compresión H.26/MPEG-4.
Para hacer que la cámara funciones, contaremos con una batería de ion litio recargable de 700 mAh, quizás algo pequeña para lo que estamos acostumbrados en la mayoría de las cámaras digitales actuales, pero que en principio, para un uso normal, nos aguantará.
Su memoria interna es de 25 Mb, y podemos añadir una tarjeta de memoria que será de los tipos SD Card, SDHC o SDXC.
Conectividad de la Coolpix S6800
En cuanto a la conectividad de la Nikon Coolpix S6800, sin duda se trata de uno de los aspectos más completos, ya que nos permite conectar mediante cable utilizando un puerto USB 2.0 de alta velocidad o incluso mediante microHDMI.
Y si contamos con un dispositivo inalámbrico, su conexión Wi Fi nos permitirá ahorrar mucho tiempo y sobre todo nos ayudará a realizar descargas rápidas sin tener que disponer de cables.
Conclusiones
La imagen general que nos ofrece la Nikon Coolpix S6800 es bastante positiva. Quizás falla un poco en la batería, que debería contar con un mayor amperaje, pero en conjunto se trata de una cámara muy equilibrada con mucho que ofrecer a sus propietarios.
Su aspecto es bastante sencillo, y en cierto modo vuelve con su diseño a aquellos noventeros que tan buen sabor de boca puede dejar a algunos de nuestros lectores.
Por su parte, la pantalla aprovecha al máximo el espacio, y todos los controles están bastante bien colocados, ofreciendo una muy buena accesibilidad y permitiendo un control muy intuitivo.
En esencia, se trata de una cámara compacta muy recomendable para un uso normal pero buscando una buena calidad final.
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