NINE: DETRÁS DE CÁMARAS. Por Erica Encarnación

Cuando la música, el baile y la actuación se une y bajo la dirección de Rob Marshall, recordado por la oscarizada Chicago, solo podemos esperar algo realmente impresionante. Y no es para menos, porque Nine, además de reunir todos estos ingredientes también ha logrado juntar a 8 importantes estrellas de la actuación y la música: Nicole Kidman, Penélope Cruz, Marion Cotillard, Kate Hudson, Judi Dench, Sophia Loren, Stacey Ferguson (Fergie, cantante de los Black Eyed Peas) y Daniel Day-Lewis.
Nine tiene como base a la película Ocho y 1/2 (Otto e mezzo) de Federico Fellini, y a su vez es la adaptación para el cine de una obra de Broadway, que también toma a esta película como inspiración y a la que bautizaron como Nine, es decir nueve, porque el propio Fellini pidió que el musical no tenga el mismo nombre que su película. Lo que sí se mantuvo fue el nombre del protagonista, Guido Contini, el director de cine más famoso del mundo, quien esta a punto de iniciar la producción de su esperada película “Italia”, cuando repentinamente todo se transforma en un desastre, viéndose afectados su poderosa creatividad y su ferviente vida amorosa.
Rodeado por un panorama de impresionantes mujeres, entre las que se encuentran su tentadora amante Carla, interpretado por la española Penelope Cruz, papel por el cual ha sido nominada a un premio oscar, en la categoria de mejor actriz de reparto. La francesa, también ganadora de un oscar, Marion Cotillard encarna a su devota esposa Luisa. El papel de su musa Claudia recae en manos de Nicole Kidman, mientras que su confidente y diseñadora de vestuario Lilli es interpretada por Judi Dench. Completan este ramillete Kate Hudson como la coqueta periodista de Vogue, la instructiva prostituta de su niñez, Stacy Ferguson más conocida como Fergie, y la legendaria Sophia Loren finaliza la lista representando a su amada madre “Mamma”.
Representar todo este mágico y alocado mundo hizo que Rob Marshall y su equipo crearan plataformas rodantes y creativos escenarios a modo de teatro, capaz de albergar a una veintena de bailarines en escena. Además de acuerdo al guión del film, este mismo escenario debía transformarse 10 veces distintas en mundos reales e imaginarios.
El vestuario de Nine, se basó en la sensual y glamorosa moda del cine italiano de los 60, cada traje fue creado en respuesta a las coreografias y movimientos corporales que los actores debían realizar. En la creación de este exuberante guarda ropa se empleó más de un millón de cristales Swarovsky que fueron repartidos en 36 diferentes vestidos.
Y a pesar de contar con un elenco de actores con amplio dominio del baile y el canto, el proceso de preparación de sus personajes los llevó a recibir entrenamiento en estas disciplinas. Un vibrante, original y provocativo musical es lo que veremos en Nine, la oportunidad perfecta para delelitarnos con el magestuoso trabajo de un importante grupo de actores y una completa demostración talento puro.