… creer que el mundo está a punto de hundirse. Es nuestra responsabilidad mostrar lo contrario. Es nuestra responsabilidad mantener encendida la llama.”
Reflexión de Daniel Mendoza
Es nuestra responsabilidad no contaminar las pequeñas personas a nuestro alrededor con pensamientos catastróficos pero, a la vez, darles sabiduría para cuidar nuestra sociedad y nuestro planeta. Es nuestro deber fomentar el sentido de la responsabilidad y hacerles ver la importancia en cada acción – por pequeño que sea – para que no se paralicen por el sentimiento de impotencia. Es nuestra responsabilidad darles vista global pero con la mirada en su mundo directo. Es nuestra responsabilidad, como padres y adultos, que sigan viviendo con ganas e ilusión, pensando que siempre pueden confiar en lo bueno.
Reflexión mía…
… y la vuestra?