Nitram, el apodo despectivo de un joven inestable e infantiloide que vegetaba en la Australia surfera y que perpetró la mayor masacre de la historia del país. Vemos al perturbado en su vida cotidiana prematanza, dando tumbos y enriqueciéndose por mor de la suerte del loco. Casi un reality show o un callejeros patético por mano de Justin Kurzel (Macbeth, Assassin's Creed) en una prueba práctica de introspección, un vano intento de hallar un ápice de comprensión a una maldad incomprensible per se. Si lo que se nos narra es veraz o una elucubración basada en datos fehacientes es secundario, si que es relevante visualizar la cinta conociendo hacía donde se nos está llevando, estremece saber que no hay nada que pueda cambiar el final, ni guionista o director que pueda alterar lo que sabemos real.
Puntuación @tomgut65: 6/10