“Y no tienes por qué caerle bien a todo el mundo.” Me ha costado trabajo aceptar este argumento y más por que siempre he tratado de ser tolerante y comprensiva aunque no estoy diciendo que no hay que ser tolerantes sino más bien, comprender que cada cabeza es un mundo y hay que respetar.
Estoy entendiendo que no estamos para pedir disculpas por como somos o quienes somos, sino para disfrutar de lo que nos estamos convirtiendo, de lo que estamos dando al mundo.
Sin embargo, también quizá sea momento de que piense en lo que podría estar pasando cuando una persona o un grupo de personas se aleja de mi vida: o me estoy rodeando de personas que no son honestas, o algo pasa conmigo y mi forma de relacionarme con los otros.
A veces nos juntamos con personas que sólo están con nosotros para su conveniencia y los puedes identificar cuando no les puedes dar algo que ellos necesitan y su reacción es alejarse, culparte o enojarse. Pero también necesito reflexionar si yo soy la del problema o si me comporto con reacciones que la gente no espera de mi… ¿Y entonces qué esperan?
Creo que si finalmente no le agradaremos a todos mejor que sea por hacer el bien que por hacer el mal, que sea por hacer lo correcto y no lo incorrecto.
Si todos trataramos de comprendernos creo que este mundo sería un poquito mejor.
Los quiero.