Revista Salud y Bienestar

No eres lo que comes, pero si lo que piensas

Por Registrantee

Prevalente en el mundo de hoy, especialmente el mundo occidental, es la idea de que la comida puede y de hecho nos hacen daño y que tiene algún tipo de poder sobre nosotros. 

Por ejemplo, se cree que ciertos alimentos son “malos” y otros son “buenos”. Siempre estamos mirando hacia fuera para “que” los alimentos que nos hacen engordar, o ‘que’ la comida que nos hace propensos a algún tipo de enfermedad o dolencia. Pero, antes de seguir adelante, hágase estas preguntas rápidas. ¿Cómo sabes ‘que’ la comida hace que ‘los’ efectos? ¿Y cómo sabe usted que los alimentos pueden hacer que la grasa? O enfermo? O te mate?

Si usted tomó todas las descripciones de comida que he escuchado en su valor nominal, lo más probable es pensar que es algún tipo de monstruo, un ser vivo que no tiene otra finalidad que la de buscar su destrucción. Ahora, obviamente, no lo veo de esa manera, pero es que realmente lo lejos cómo se percibe actualmente? Toda esta charla sobre “buenos” y “malos” alimentos da la impresión de que la comida tiene una mente propia, que no tiene poder en sí mismo a hacer con nosotros lo que quiere. Es posible que se ríen de esto y decir algo como, “Oh, no seas tonto”, pero en serio, te preguntas, ¿cómo es que puedo pensar en la comida como ser capaz de hacerme daño y no creo que es un ser vivo consciente con poder propio?

Por desgracia, vivimos en un mundo donde la mayoría de la gente cree todo lo que oye, con muy poca discriminación o el pensamiento involucrado en absoluto. A medida que avanzamos más allá de este punto, se reconoce que todos los que lean este artículo será en los diferentes niveles de la creencia y la apertura, por lo tanto, cada uno va a salir de ella lo que él está listo para recibir.

Para la mayoría de la gente, es de sentido común que los alimentos pueden hacernos daño. Nosotros no pensamos dos veces antes de que alguien diga “estancia lejos de este alimento” o “comer la mayor cantidad de este alimento que pueda.” Pero, lo que no se dan cuenta, es que todas las declaraciones como éstas son un reflejo de la creencia, sino que son las creencias individuales o compartidas acerca de la comida, que no representan lo que la comida es en realidad.Cualquier persona puede venir y decir que un alimento es esto, o un alimento es eso. Sin embargo, se limita a decir que sea cierto? Si me acercó y dijo un plátano te hará lucir 10 años más joven, ¿significa eso que va a pasar? ¿Eso hace que sea una realidad?

Puede que no haya reconocido esto antes, pero todas las cosas que etiquetar como «esto» o «eso» no son más que un reflejo de nuestras creencias acerca de ella. Más importante, sin embargo, es la realidad de que nuestras creencias sustituyen y prevalecen sobre lo que la comida es en realidad y los efectos que pueda tener. En otras palabras, sus creencias o pensamientos sobre la comida influye en los efectos que tiene sobre ti. Esto es por qué dos personas pueden comer la misma comida y una persona se enfermará y el otro no. ¿Has notado cómo una persona supuestamente engorda por comer cierto tipo de alimentos y otra persona que come la misma comida exacto no lo hace?

Aquí está el problema, si es que en realidad era el alimento que engorda, o enfermo, o lo que sea, entonces tendría los mismos efectos en todo el mundo. Pero no, por lo tanto, tiene que haber otra causa en el juego. Y ahí está: nuestras creencias. Usted es lo que usted piensa, no lo que usted come. Desglosado aún más, sus pensamientos sobre la comida tienen un mayor efecto sobre ti que la comida en sí lo hace. ¿Qué piensas de tu cuerpo, la salud y la enfermedad se determinará cómo la comida se utiliza en su cuerpo, y cómo la química de su organismo procesa las grasas, por ejemplo, hidratos de carbono o.

Por ejemplo, si usted cree que los productos químicos en ciertos alimentos te hará daño de manera drástica y tener consecuencias desastrosas, pues incluso dosis pequeñas de estos te hará daño. Sin embargo, otra persona con creencias totalmente opuestas acerca de la comida no se verá perjudicado un poco a ella. Es la misma comida con las mismas sustancias químicas, sin embargo, hay resultados completamente diferentes, que se rigen por dos sistemas de creencias diferentes. En consonancia con lo anterior, cualquier producto químico altera en el cuerpo va a hacerse justicia después de los problemas internos han funcionado.

Estos mismos principios se aplican a las dietas. Por lo general creo que las dietas se basan en la idea de que las personas tienen sobrepeso porque comen demasiado. Pero, en realidad, la gente come demasiado porque creen que tienen sobrepeso. La imagen física siempre encaja porque la creencia en estar con sobrepeso condiciones del cuerpo para comportarse de esa manera exacta. Así, en la extraña moda, dietas, simplemente reforzar la condición, ya que la gente dieta, ya que creemos tan profundamente en su estado de sobrepeso. La solución es suspender voluntariamente esa creencia. La persona tiene que hacer un esfuerzo consciente para insertar una creencia diferente, o más preferiblemente, dejar de lado todas las creencias acerca de ella por completo.

Y así es como funciona en todos los casos. En este caso, no es la comida que es el problema, pero sus pensamientos y creencias acerca de la misma. Cambia tus creencias acerca de ello y que va a cambiar la forma en que le afecta. Por mucho que nos gustaría culpar a los alimentos para nuestros problemas de salud, no es el problema, ni es el enemigo que está hecho para ser. En verdad, no hay enemigos, sólo creencias erróneas y equivocadas y percepciones. Cambie estos y cambia tu vida y todo lo que contiene al mismo tiempo.

 


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