Como en una carrera de relevos, el Sr. Pitaluga ha cogido el testigo en la competición que, iniciada por el Sr. Calatayud, persigue el objetivo de comprobar quién pronuncia el desatino más grande. La manipulación que se está realizando alrededor de la construcción del nuevo Conservatorio está alcanzando, ya, cotas absurdas y, desde luego, muy alejadas de los verdaderos intereses de los que terminarán siendo últimos beneficiarios de la nueva infraestructura docente que ya ha empezado a ser una realidad.
No dudo de la representatividad del Sr. Pitaluga. Es, al fin y al cabo, el presidente del AMPA del Conservatorio. Pero lo cierto es que a algunos no les vale nada, y creo que éste es su caso. No le vale que la propia Consejera haya afirmado, asegurado y certificado en dos ocasiones a través de declaraciones realizadas ante los almanseños, y en muchos otros momentos fuera de nuestra ciudad, que el Conservatorio va a ser construido. No le vale que tanto el actual, como el anterior Delegado de Educación en Albacete, amén de otros cargos provinciales y regionales, hayan confirmado el compromiso público del gobierno de Castilla-La Mancha en este asunto. No le vale que, horas antes de iniciarse una concentración de padres y alumnos, el propio delegado explique y detalle los pasos que se van a dar y el calendario previsto para la construcción. No le vale que las máquinas estén ya sobre el terreno realizando los primeros trabajos. Nada, de nada, de nada. Está en su derecho. El mismo que yo ejerzo al dudar de que el conjunto de los afectados compartan esa actitud.
Ha afirmado el Sr. Pitaluga que las madres y padres se sienten "burlados y engañados". Más allá de que para defender una posición el Sr. Pitaluga necesite llamar mentiroso a alguien, una afirmación de similar calibre la hizo hace años cuando aseguraba que el AVE nunca pasaría por Almansa y que, desde luego, jamás existiría una nueva estación. Las vías ya están ahí y el proyecto de la nueva estación sigue su curso, como ya ha expuesto el Ministro de Fomento repetidamente. También vino a decir lo mismo con la defensa a ultranza de la Laguna del Vínculo y las consecuencias fueron que la limpieza del Pantano estuvo al borde del precipicio, la laguna sigue siendo lo que siempre ha sido y la limpieza de la Acequia de Alpera se quedó sin presupuesto. No parece que la bola de cristal del Sr. Pitaluga esté muy fina en sus pronósticos, lo que me hace pensar que si él dice que no se va a hacer el Conservatorio es que se hará.
La concentración del pasado miércoles, a la que no dudo que padres y madres asistieron con su mejor voluntad, terminó convirtiéndose en un acto contra el Gobierno de Castilla-La Mancha (ya saben lo que los desmemoriados repiten como un mantra: "La Junta no se acuerda de Almansa"). Esa, sin duda, era la pretensión de todos los concejales del Partido Popular e Independientes que buscaban su hueco en la fotografía. Y esa, sin duda, era la intención del Sr. Pitaluga cuando, fuera de todo contexto y como una nota disonante, ya que de música se trata, afirmó, como parte del manifiesto y arrogándose la representatividad de los presentes, que "Ya sabemos a quién vamos a votar". ¿Pedía el voto para su partido, Izquierda Unida, de quien es portavoz? ¿Lo pedía para el PP o los Independientes, que sonreían al escuchar sus palabras? ¿O lo pedía para el PSOE, cuyo gobierno será quién termine construyendo el Conservatorio? En algunos asuntos, como en la bebida, las mezclas no son buenas.