No es país para ellAs.

“Vivimos en un país peligroso”. Con esta frase, contundente me recibió Paco el otro día cuando baje a por el enésimo café del día. Eran las 10 de la mañana pero uno que se confiesa “cafetómano” y lleva días in pegar ojo ya no puede recurrir a muchas cosas más que no sea un café cargado como la mula de Juan Valdez. Le pregunté que a santo de qué venía eso, si se supone que vivimos en un país civilizado en el que ahora hasta se sube el SMI, si hablásemos de otros lugares… Me miró serio, con los ojos cristalinos y me soltó, contundente, un “tu NO tienes hijas” marcando mucho el femenino. Lo entendí.

Paco se refería, sin duda, a algo que parece que se siga pasando por alto. Se suceden los gobiernos. Las Derechas, las izquierdas, los presidentes y hay algo que no cambia, si no es que empeora cada vez más. Nos siguen asesinando a nuestras compañeras sin que parezca

que se haga nada serio al respecto. Llevamos ya unas cuantas en lo que va de año, siete a estas horas una de ellas menor, (quédate con el dato) y continuamos fiando las cosas a la frase de “esperemos que sea la última” sin que como dice Fani Grande “se pare el mundo”. Porque eso es lo que debiera suceder, debiéramos dar le al “pause” en el mando a distancia y hacer como hacía la “seño” en clase cuando éramos renacuajos, “de aquí no se mueve nadie hasta que no aparezca el estuche de Benganito de tal” y vaya si aparecía. Parece una tontería pero si esta sociedad no sabe afrontar esta tragedia como personas adultas, intentémoslo como niños inmaduros, igual hay suerte y va y funciona pero lo que de verdad resulta intolerable es que aquí todavía exista aquello de “la maté porque era mía” ya basta ¿NO?.

Pero hay algo más desalentador en todo esto. Se supone que confiamos en nuestras instituciones, en que ellas van a ser capaces de ofrecer lo que nuestras niñas no encuentran, un hogar seguro. Y entonces es cuando lees noticias como lo del centro de

Menores de Mallorca y se te caen los palos del sombrajo. ¿Qué no te has enterado? Pues si quieres pincha aquí   pero si no, te lo resumo en un tris. Resulta que en Mallorca existe un centro de menores X donde están alojadas unas niñas (hasta ahí, normal) pues va y nos enteramos que las menores eran “utilizadas” (marco el utilizadas y añado el “como si trastos fuesen”) para la prostitución y algunos de los cuidadores, al parecer, estaban al corriente) ¿Cómo se te queda el cuerpo? A mí, desde liego me dieron ganas de acercarme con una antorcha y una garrafa de gasolina, pero bueno, como creo que soy civilizado, confiaremos en que la justicia entre a sangre y fuego en el asunto y se lleve por delante como un tren de mercancías al que tenga que llevarse.

Después de esto, de verdad que entendí qué quería decir Paco con aquello de “Hijas” y

solo pude darle la razón, este no es un país para mujeres, simplemente porque el respeto hacia ellas no es que no exista, es que a estas horas puede que ni se le espere en las instituciones y eso es grave, muy grave. Deberíamos, “parar el mundo” y que no se mueva una hoja hasta que no consigamos respeto, sólo eso, respeto hacia ellas. Me gustaría ahora pedirte un favor, si conoces a alguien al que no le ha llegado la noticia de que ellas merecen nuestro respeto y que los tiempos cavernícolas han pasado, haznos a todos un favor, no te calles, cuéntalo a las autoridades, es fácil, llama al 016. Hay muchas vidas en juego.  Os juro que eso puede ser hasta más importante que otros asuntos a los que le damos más “bombo y platillo”. Hablamos de seres humanos, de nuestras compañeras que resultan asesinadas por trogloditas que no entienden como funciona el mundo civilizado.