Y como podéis adivinar, mi post de hoy es casi una despedida. No sé muy bien si alguna vez volveré a escribir algo pero visto lo visto, me da la sensación de que no va a ser así. Lo siento en el alma porque me encanta escribir y publicar, pero para que me lean 4 gatos y me comente como mucho un, mejor no subo ningún post y ya está. Entiendo que mi propio blog está dejando de tener sentido. Son las reglas del juego y hay que aceptarlas.
Todo empezó en Diciembre de 2008. Pretendía ser una especie de diario de una cajera estresada (de ahí el nombre del dominio). Y aquí escribía todo lo que me apetecía para dar rienda suelta a una afición que no es otra que la escritura. Poco a poco el blog fue tomando vida y se convirtió en un blog de reseñas literarias. También de vez en cuando subía una canción o hablaba de otros temas. Pero sobre todo la literatura era lo que tiraba de él. Así, empecé a leer de forma compulsiva, participando en sorteos o lecturas conjuntas. Muchos escritores me pedían colaboración para reseñas literarias y el blog tiraba de mí a todas horas. Pero de vez forma inesperada, mi ritmo lector cayó en picado y mi blog paró también. Mientras tanto las redes sociales se estaban comiendo los blogs. El mío y el de todos. Y cada vez somos más los que decidimos abandonar. No nos queda otra. Ha sido un placer crear este blog. De hecho, no lo voy a cerrar sino que lo dejaré abierto porque considero que sus contenidos son muy interesantes y merece la pena tenerlos para posibles búsquedas de usuarios. Pero todo en la vida tiene un final y es evidente que El rincón de Leira se está acabando. Ya ni los escritores te responden para una entrevista (si me llega alguna la publicaré, claro está). Y quién sabe si algún día yo misma subiré alguna reseña de algún libro que lea o algo que crea oportuno. De momento, lo dejó así: en un stand by incierto que mucho me temo va a ser su punto final. Así que hasta siempre a todos los que me leéis. Yo seguiré con mi rutina diaria leyendo vuestras reseñas, no vayáis a pensar. O veré vuestras publicaciones en Instagram. O donde sea. El rincón de Leira echa el cierre. Leira no sabe si volverá a abrir la puerta de nuevo pero de momento pone el cartel de:...Y quién sabe si volverá.