Definitivamente, en medicina dos y dos no son cuatro y diciembre fue el mes de los “milagros”; fue el mes en que una amiga mía y una amiga de mi hermana se quedaron embarazadas. El mes de 1+1 =3.
¿Qué tiene eso de especial? Las dos tienen ovarios poliquísticos y algunos trastornos hormonales. A ambas algún médico les había dicho que tendrían muchas dificultades para tener hijos. Incluso algún médico agorero le dijo a mi amiga que NO podría tener niños.
Pues bien, las dos dejaron los anticonceptivos en diciembre, y las dos se quedaron embarazas en diciembre, ¡al primer intento!
La que supuestamente no iba a poder tener hijos ya es madre y su primer bebé fue concebido en un período de cuatro meses sin regla, por lo que lógicamente no esperaba en absoluto un positivo en el test de embarazo. ¿Increíble? ¿Suerte?.Esto no es una cienca exacta.
Conozco otro caso en que la pareja no lograba el embarazo y cuando inciaron los trámites para una adopción, el embarazo llegó. ¿Casualidad rebuscada? Probablemente no, pues dicen que en este asunto tiene mucho que ver la mente y parece que algo de eso hay.