No esperarás que note que fuiste a la peluquería. Métete en la cabeza que eso no ocurrirá jamás. Te conformarás con que lo noten tus amigas, tu madre o la vecina del sexto. Él te verá por la mañana rubia con el pelo por la cintura y por la tarde pelirroja con permanente y te saludará como si nada. Puede que te diga «tu rostro tiene algo diferente», pero ten por seguro que no sabrá qué es.
Recordarás: si tu príncipe nota que fuiste a la peluquería solo puede significar una cosa: es gay.