El valor para cambiar nuestras vidas
es un don presente en todo ser humano
Para iniciar este proceso debemos sembrar de creencias más amplias nuestra mente y liberar el valor que reside en nuestro corazón. Muchos “piensan” que no poseen ese valor – como el león de “El Mago de Oz”*-, pero no es cierto. Son nuestras creencias limitantes las que nos llevan a pensar eso. Tratar de reconocerlas y luego ampliar sus límites o simplemente dejar de habitarlas, sería un primer paso imprescindible. Una vez hayamos dejado el suficiente espacio en nuestra mente para que las excusas no taponen nuestro corazón, éste empezará a manar el valor que necesitamos para cambiar nuestra vida.
Este valor, incluso taponado por las creencias, es capaz de abrirse camino en momentos de muy fuertes emociones; todos conocemos casos de personas que llevan vidas muy “normales” y que de repente, en unas circunstancias que les arrancan de la cotidianidad, se convierten en auténticos héroes. Su valor no nace en ese momento, estaba dentro de ellas esperando ser liberado. Las fuertes emociones quitaron el control a las creencias limitantes, permitiendo que las fuerzas de sus corazones tomasen el mando: el héroe interior que habita en todos nosotros se hizo presente. Os invito a conocer un claro ejemplo de esto. Nuestro héroe, William Rodríguez, se encontraba en las Torres Gemelas en aquel 11 de septiembre, trabajaba en ellas limpiando las escaleras... Si queréis conocer la historia pinchad sobre la siguiente dirección:
http://wwwvivencias12.blogspot.com/2010/12/william-rodriguez-de-barrendero-heroe.html
El Camino Dorado aparece ante nosotros
cuando nos dejamos guiar por el corazón...
*Para leer o descargar gratuitamente el libro “El mago de Oz” pincha sobre su título