Revista Diario

No le gusta el fútbol...

Por Mamareciente

A Chiquinini  ( sé que tiene delito seguir llamándole así ahora que acaba de cumplir 5 años, pero de momento no sé cómo rebautizarle), no le gusta el fútbol.

En casa no somos muy futboleros, ni muy deportistas…y ha salido a sus padres. Que correr detrás del balón le cansa, dice. Es hijo mío sin duda.

Algo irrelevante, no? Pues no. Los niños de su clase, desde bien pequeños, han resultado ser SUPER futboleros. A Chiquinini, aunque le animamos a jugar, le decimos que todo es cuestión de práctica, que puede jugar a eso algún rato, etc, no hay manera de venderle la moto. No le gusta nada.

Problema:  se queja de que sus amigos sólo juegan a eso,  que son unos pesados, y algún día dice que no quiere ir al cole…

Recuerdo escribir alguna vez cuando era pequeño, como Chiquinina ahora, la tranquilidad que daba saber que sus padres cubrían todas sus necesidades y podían hacerle feliz, y pensaba en que algún día eso cambiaría, tendría amigos, enfados, digustillos… Pues parece que ese día está llegando.

No sé cómo ayudarle y me siento impotente. No tiene ni el más mínimo problema para relacionarse con otros niños allí donde va, y tiene amigos en el cole. Pero cuando llega la hora de echar un partido… El otro día, en un cumpleaños,  jugaron unos minutos al fútbol y Chiquinini se apartó y se fue a trastear él sólo por ahí. Qué rabia y qué pena me dio.

En la piscina ( está aprendiendo a nadar) es el único de su grupo que ha subido al siguiente nivel. Todo esto me da pie a explicarle que todos somos diferentes:  hay gente alta, gente bajita, gente con ojos azules o marrones, a unos se les da bien dibujar y colorear, a otros leer, a unos el fútbol, a otros nadar…

Pero cuando llega la hora del recreo y todos juegan al balón, y él apenas lo intenta porque no le gusta y no quiere, las palabras que antes le haya dicho yo no sirven de mucho. 

Sólo puedo seguir animándole.


Volver a la Portada de Logo Paperblog