No me queda más remedio

Hablar del aborto me pone histérico, pone en pié de guerra todas mis neuronas, los pensamientos se atropellan por salir y dejarse oir como el aire de un globo por el agujerito de inflar, si hay suerte sale todo ordenadamente, pero haciendo pedorretas, si no, explota y sale todo a la vez. Pero no me queda más remedio, porque si lo dejo seguir inflándose, explotará sin remisión. Todo tiene un límite, y la capacidad de mi globo también.
He leído hoy que el 95 % de las mujeres españolas aborta en caso de resultado positivo para SD en la amniocentésis. Qué barbaridad. No las censuro a ellas, puede estar bien que si te dan a elegir quieras un niño perfecto, mejor con una herencia millonaria, y si le dan el título de Ingeniero a los 15 años, le dará tiempo a estudiar un doctorado. Pero la vida no es así, las cosas hay que currárselas, ganarlas con esfuerzo y solo se valorarán si te ha costado algo conseguirlas.
No hablo por hablar, digo las cosas meditándolas mucho, quizás podía decir más, pero no tengo tiempo de pensarlo, y no lo digo. Que quede bien claro que no soy antiabortista, respeto las decisiones de la gente que decida abortar, bastante lío mental  tendrán para tomar esa decisión como para encima recibir críticas o reproches. Somos libres de elegir entre el bien y el mal, sobre todo en lo que nos afecta a nosotros mismos. Lo que pasa es que si elegimos el mal, sobre todo en lo que afecta a los demás, siempre está alguien que nos lo hará pagar, la justicia Divina o la Humana, cuyas leyes son las mismas, aunque la humana es más efectiva, por ser más visible e inmediata. Todas las leyes se redactan para proteger la dignidad de las personas, su patrimono, su integridad, su estabilidad; sus derechos como ser humano. Si robas, zás! a la cárcel, si secuestras, zás! a la cárcel, si asesinas, zás! a la cárcel, y así sucesivamente...
Lo que yo critico es la Ley. Mal hecha, mal redactada, contradictoria y permisiva. Quiere ser más papista que el  Papa por el simple hecho de enfatizar una ideología política, porque los derechos humanos los pisotea sin piedad. Hoy por hoy, a nadie se le ocurre discriminar a un discapacitado. Independientemente de ser creyente o no, practicante o no, sí es un hecho histórico la existencia de señor llamado Jesús que predicaba cosas humanamente buenas, predicaba el bien y no el mal. Luego vino la Iglesia y empezó otra historia que no es el caso discutir aquí. Se escribió que este Joven predicaba a las masas, en cierta ocasión quisieron retirar a unos ruidosos chavales, que jugaban jaleando por allí cerca. Intentaron retirarlos para que no molestaran, y El dijo: dejad que los niños se acerquen a mí. Os imaginais que la frase fuera "dejad que los niños se acerquen a mí, tú no, que eres subnormal, señalando a un down que jugaba con el resto. Esta discriminación sería impensable hasta para los más ateos. Bueno, que me desvío del tema.
Digo que la ley es contradictoria porque reconoce que a partir de que los órganos vitales del feto empiezan a funcionar, o sea allá por la 14 semana, creo, el feto se considera ser humano, con todos los derechos y no se le puede abortar. Esto es la ley, lo dice la ley y quien lo contravenga, será castigado por los tribunales. Bien, así mismo dice la ley que 7 u 8 semanas después, si se detecta que hay una alteración cromosómica grave, también se puede abortar sin infringir la ley. O sea, que permite abortar a un ser humano legalmente reconocido en el caso anterior, por tener una discapacidad, por ser Down se le puede abortar (si no lo fuera no se podría). Seguidamente me planteo: ¿quién se cree con derecho a decidir que una trisomía 21 es una alteración cromosómica grave? ningún científico, por incluirlos a todos, tiene conocimientos suficientes como para calificar la trisomía 21 como una afección grave, no saben ni por qué se produce, ni como paliar fisiológicamente sus inconvenientes. Vale más la palabra de la experiencia del padre de un Down en cuanto a comportamiento, integración y gravedad de su afección, que todos los estudios y suposiciones que ha hecho la ciencia hasta hoy. He leído aterradoras consecuencias extraídas de informes médicos de hace 40 ó 50 años. Hoy es distinto, se va mejorando, se puede hasta abortar si quieres. 
Hoy en día, se puede decir que un bebé con Sídrome de Down tiene una esperanza de vivencia similar al resto de la humanidad, crecen, caminan, comen, se desarrollan, estudian una carrera, se enamoran, se casan, viven solos e independientes, tienen las mismas enfermedades, las mismas tristezas y alegrías, las mismas esperanzas y deseos, se divierten y sufren como el resto de la humanidad.¿Donde está la alteración cromosómica grave?. Lo único que por ahora no pueden hacer de ninguna de las maneras es la reproducción, no pueden tener hijos, la mujer es estéril y el hombre casi con toda seguridad. ¿quizás es por esto que la alteración es grave?. A lo mejor es porque conseguir todo lo que les iguala al resto de la humanidad cuesta un esfuerzo extra, de eso si saben padres y profesionales.
En definitiva, abortar ahora es una decisión paterna, más de la madre que del padre. No sé que consideraciones se tienen en cuenta para abortar, quizás no se quiera hacer el esfuerzo extra de enseñar a tu hijo a vivir, darlo todo por tu hijo pero ¿lo vas a dar por tu siguiente hijo sin alteración cromosómica?. Quizás se espera un hijo perfecto, que no tenga down, que de mayor no fume, no beba, no use drogas ni mate ni maltrate a nadie cuando crezca, que sea alto y guapo e inteligente a más no poder. Pero es que estas virtudes se le suponen a un down también, pero hay que enseñarle, hay que educarle. Al resto de la humanidad también, especialmente a la gente que decide abortar sólo porque su hijo no es perfecto según su rasero, sólo porque su hijo es "mongolito". 
Y sin embargo, mi hija es perfecta.