Revista Coaching

No mires atrás… ni demasiado hacia delante

Por Jofoba @jordifortunybad

No mires atrás… ni demasiado hacia delante.

En algún lugar he oído que mirar al pasado es una de las causas de la depresión, y anticipar el futuro lo es de la ansiedad.

No pretendo hablar de estas patologías, nada más lejos de mi intención, son cosas muy serias y para eso ya están los profesionales.

Pero si que me gustaría hacer una reflexión, ligada a esto, en el ámbito de la efectividad. Y es que nuestra visión de pasado y nuestra expectativa de futuro tiene mucho que ver en cómo de efectivos somos.

Me refiero a que, del pasado, debemos recoger experiencia y aprendizajes. Nada más. Debemos ir al pasado a buscar recursos para hacer ahora. Ser efectivo significa dedicar nuestra energía a lo que podemos hacer, por tanto, malgastarla en pensar «qué hubiera pasado si» no nos aporta nada. Aunque mucho cuidado, ya que nuestro entorno cambia muy rápido, con lo que nuestra experiencia pasada puede quedar obsoleta pronto.

Bien, has visto pues, que del pasado: recursos, no preocupaciones. ¿Y qué pasa con el futuro?

Ya lo hemos hablado muchas veces. Sin ir más lejos en uno de los últimos post. Es bueno tener un plan, pero no sobreplanificar. Puede parecer incongruente, no lo es. Te lo cuento. Definir nuestras metas es importante, definir que queremos nos marca el rumbo. Pero definir en exceso el camino, normalmente acarrea estrés y ansiedad. Si definimos anticipadamente todos los pasos para llegar a nuestra meta, algunos de estos pasos pueden no ser viables, ya que las condiciones de ejecución, cuando lleguemos, habrán cambiado. O bien, podemos encontrarnos con que estaban mal definidos porque no contábamos con toda la información en un principio. O si hay pasos complicados, pero aún lejanos, nos preocuparemos en exceso de una cosa que aún no podemos hacer. Estas son solo algunas de la las cosas que pueden pasar si sobreplanificas. Así que es importante tener el rumbo, pero dedicar toda nuestra atención al presente, en la acción inmediata.

Estos dos aspectos influyen muchísimo en nuestra motivación. Además de evitar preocupaciones, recogemos lo mejor de cada caso, lo que nos posibilita hacer, hacer y hacer.

Así que: mirar atrás… poco. Y mirar hacia delante, lo justo.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas