Contaba Mario Vargas Llosa que en el Paris de los 60 hubo una ruidosa polémica en relación con el proyecto del entonces ministro de cultura, André Malraux, de "limpiar" todos los edificios clásicos de Francia. Los "puristas" decían que era una herejía modificar estas maravillosas construcciones arquitectónicas ya que iban a perder su personalidad y su encanto. Al final se llevó a cabo el proyecto y el resultado fue asombroso: hubo unanimidad en reconocer que el resultado había sido magnífico, que con la limpieza se podían admirar la delicadeza de sus detalles, y que los edificios parecían no sólo más hermosos, sino que a partir de esa rehabilitación envejecieron mejor.
Con la piel, y en general, con el cuerpo humano ocurre lo mismo. El uso discreto y riguroso de determinadas técnicas puede ayudarnos no sólo a vernos mejor sino a envejecer de forma más saludable.
Y es que a veces envejecer con naturalidad, sin aprovecharse de los avances de la dermatología moderna, está sobrevalorado. Un ejemplo de naturalidad es la evolución del pecho femenino. Si vemos el pecho de una persona de una tribu de África a los 40 años comprobamos que su evolución "natural" es mucho menos estética que la evolución natural del pecho de una mujer de un país más evolucionado.
En la piel ocurre lo mismo. El uso prudente y con sentido común de las técnicas dermatológicas para revitalizar la piel e inducir la formación de colágeno puede ayudarnos a envejecer con elegancia y discreción.
Existen muchas técnicas en función de las necesidades de cada paciente. Por ejemplo, un paciente con imperfecciones en la piel como manchas, venitas o cicatrices se beneficiará de los nuevos láseres no invasivos que eliminan estas alteraciones.
Pero si alguien me pregunta cual es la técnica que me parece más útil en la prevención del envejecimiento facial sin duda diría que se trata de los que nosotros llamamos el LIFTING LIQUIDO RRR.
Mediante esta técnica usamos pequeñas dosis de Botox, inductores de colágeno y acido hialurónico en puntos estratégicos de la cara para conseguir las 3 "erres": revitalizar la piel, reposicionar los tejidos y rejuvenecer la mirada. La técnica se realiza en 10 minutos y el paciente puede incorporarse a su vida normal inmediatamente con algo de maquillaje. En ocasiones puede haber algo de inflamación y algún hematoma.
Cuando un paciente me pregunta cuanto tiempo dura el efecto de esta técnica le respondo: "Toda la vida", y a continuación añado: "Siempre y cuando la repitas cada 6 meses". Es decir, esta técnica es una forma de prevenir y mantenerse, por lo que hay que realizarla de forma prudente cada 6 meses.
A continuación, os pongo un video de la técnica a cámara rápida:
www.clinicadermatologicainternacional.com