(NO SÉ LO QUE PIENSAS PERO PIENSO QUÉ PODRÍAS ESTAR PENSANDO)
Por Ermelinda Martín Duarte
El Golfo (Lanzarote) Ermelinda Martín DuarteDe pie, en la entrada, se abre una especie de paréntesis entre los dos. Me pregunto qué ha pasado. Busco rápidamente la imagen latente del segundo anterior, pero no dices nada.
Me digo a mí misma que no ha pasado nada, que lo que siento es un simulacro de emoción por catalogar. Sin embargo, esa explicación no me termina de convencer. Y tú no dices nada.
Sigo pensando que no tengo por qué darle más vueltas, tampoco ha sido para tanto. Aunque sigue ahí esa sensación con forma de hueco a la altura del esternón, y un poco más abajo. Encima, no me dices nada.
Esa inmutabilidad tuya, eso significa algo. Porque, de pronto, pude percibir cómo se detuvo el flujo de lo que estaba siendo unas abismales milésimas antes de que decidiera empezar a pensar que no había pasado nada. Y eso siempre es por algo. Sigues sin decir nada.
Definitivamente, no lo vi venir. Pero dadas las señales ha tenido que pasar algo.
Entonces, luego de ese segundo de profundo análisis y a punto de rendirme a la realidad de lo que quiera que hubiera podido pasar, ahí, de pie en la entrada, me sonríes. El paréntesis se cierra. Y el flujo retoma su camino.
Ermelinda Martín Duarte
@emeritte82
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