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Los europeos, digo… hemos vuelto al principio, hemos retrocedido
cincuenta y cinco años y nos tenemos que conformar con un mercado. Se
dirá que es lo que heredamos del Tratado de Roma, pero no es verdad:
aquello era casi un poema, un arma cargada de futuro, y lo que tenemos
es un herido grave, muy grave. Y, además, borracho de vino, de ese vino
malo que es la sangre de la propia herida.
.../Cuando advierta que para producir necesita autorización de quienes no
producen nada… entonces podrá afirmar que su sociedad está condenada.
Lo dijo Ayn Rand, la escritora ruso-americana, y sabía muy bien lo que
decía y de quien hablaba.
De nosotros. Es una suerte que ya no suenen las campanas, porque
sabemos por quienes doblan…
Doblan por ti, Occidente…
Tino Barriuso
profesor, columnista y escritor
Artículo completo en pdf en "Osaca"
Imagen: "Enclave revista"