Islandia en Hollywood
No resulta tan sorprende que esta bella isla nórdica se haya convertido en el escenario favorito de las grandes producciones de Hollywood. Juego de tronos, Oblivion y las Vida secreta de Walter Mitty, son sólo algunas de las mega producciones que se rodaron en esta región montañosa situada en plena cordillera del Atlántico.
El gran atractivo de este país son sus escenarios naturales, que parecen inmaculados y apenas tocados por el hombre. Así como Costa Rica se convirtió en el sitio preferido para recrear selvas y escenas tropicales, Islandia es una ubicación óptima para capturar impactantes montañas y laderas verdes inhabitadas.
Noah en Islandia
La epopeya bíblica de Darren Aranofsky narra la historia de Noah (Russell Crowe). El personaje vive atormentado por las visiones de una futura inundación que promete acabar con la raza humana. Inspirado por estas imágenes, Noah comienza a construir junto a su familia un arca gigante, para salvar la mayor cantidad de vidas posibles.
Durante la primera parte de la película, Noah y su familia viven en una pequeña aldea en medio de un paisaje árido y oscuro. Para recrear las rocas sedimentarias de este periodo histórico, Aranofsky eligió Reykjavík, y en especial la región de Fossvogur, donde se cree que los sedimentos que bañan la tierra tienen una antigüedad que se remonta a fines de las épocas glaciares. La tonalidad oscura de estas rocas se puede apreciar en esta imagen de Axel Kristinsson.
Cuando Noah descubre, gracias a su abuelo Matusalén, el fruto que puede dar origen a la vegetación, el escenario donde habitan cambia radicalmente y se rodea de inmensos árboles y un caudaloso río. Esta parte de la película fue filmada en los bosques de Washington, en Estados Unidos. La imagen, perteneciente a Ed Suominen, fue tomada muy cerca de donde se situó la producción de Paramount durante el rodaje.
Tras el diluvio, la familia se rodea de un inmenso océano hasta que logran encontrar tierra firme. Allí el hijo menor de Noah decide separarse de su familia y emprender un nuevo camino. Este escenario rodeado de acantilados fue rodado nuevamente en Islandia, en Reynisfjara. Estas pilas de mar basalto que aparecen en la película reciben el nombre de Reynisdrangar y son muy frecuentes al sur del país.
La imagen de portada pertenece a Johan Wieland.