




Así es, nadie camina en Los Ángeles, tal como lo dice la canción de Missing Persons. Las distancias son tales, que quien no tiene coche es casi imposible que se movilice.
Los imponentes freeways, que desde las alturas parecieran venas, son las vías que comunican con velocidad los distintos puntos de la ciudad.
En el camino a Melrose Place (sí, como la serie), me llamaron mucho la atención estas imágenes en los grandes muros que dividen estas vías. Le dan tanta vida a un espacio por demás asfáltico y rutinario, que sin duda, me parece un acierto que aparezcan y saquen una sonrisa en el trayecto.
Desconozco el nombre (si acaso lo tienen) de cada una de estas representaciones. Tampoco sé si pertenecen a un artista o es producto de un empleado de gobierno. Sea como sea, esta mujer, este hombre, ese Einstein con su frase y esos gigantescos niños, felices de la vida, humanizan el rumbo.
¿Qué les parecen? ¿Les gustan? A propósito de rumbo, ¿cuál será el que tomen este fin de semana?
