Noche de Bodas; Una noche para morirse

Por Segio Morcillo.

Muchas ganas teníamos en este año de disfrutar de un buen survival a la vieja escuela. "Noche de Bodas" es una película sin dobles lecturas, directa y concisa, salvaje y sin complejos. La nueva cinta de Tyler Gillett y Matt Bettinelli-Olpin ( "Devil's Due") es una auténtica bomba de relojería.

Durante la noche de su boda, una mujer (Weaving) recibe la invitación por parte de la rica y excéntrica familia de su marido para participar en una tradición ancestral que se convierte en un juego de superviviencia.
La argumento de "Noche de Bodas" es honesto. Desde su comienzo pone al espectador en situación de lo que verá en su desarrollo. El guión realizado por Guy Busick y Ryan Murphy es trepidante, original y lleno de gracia y soltura. Su principal objetivo es que el espectador vibre en la butaca, que pase un mal rato. Su irónica puesta en escena es impecable y nos brindan momentos tan divertidos como tensos y angustiosos. Quizás el esquema narrativo nos recuerde a la fantástica "Tú eres el siguiente", pero este film va un paso más allá siendo más canalla y sarcástica que la cinta de Adam Wingard.
Noche de bodas Fotograma

Dentro del elenco destacamos a la maravillosa novia, interpretada por Samara Weaving. Letal, brutal y muy orgánico el papel que la representa. Poco a poco da pinceladas de como puede llegar a ser su personaje y está claro que es lo que más destaca en toda la película. Los demás simplemente están correctos y cumplen con su papel. No hay personaje que desentone en toda la historia. Eso es un punto muy a favor.

La historia de "Noche de Bodas" recuerda a los grandes survival que asolaban los videoclubs en los 80. No hay que buscarle 3 pies al gato. El espectador es cómplice desde el comienzo del juego macabro al que se le presenta. Da todo lo que pide un buen fan del terror: sangre, peleas, momentos de mucha tensión, mucha ironía y giros argumentales guardados en la manga para no cansarnos y mantener el interés hasta el último fotograma. Es todo un espectáculo audiovisual.

El apartado técnico de "Noche de Bodas" es muy efectivo y pensado para el tipo de película que se trata. No hay nada que destaque más que otro departamento. La música de Brian Tyler es intensa, irónica y muy cañera. Acompaña al espectador a una auténtica montaña rusa de emociones.

Su montaje es frenético, rápido y sin concesiones. Una historia así pide una dirección ágil y que de sorpresas. La cámara en mano está muy bien ejecutada y nos da la sensación en muchos momentos de estar dentro de la piel de la novia. El arte de la película es maravilloso, colores oscuros y una estética amarillenta que aunque da aspecto de elegancia y prestigio, también va degradando en un clímax agobiante y perturbador.

"Noche de Bodas" es una de las mejores películas de terror/suspense que han pasado este año por nuestras pantallas. Todo un ejercicio de estilo, de buen hacer ante las cámaras y de que a veces no necesitamos un gran argumento para pasarlo bien. Desde mi punto de vista es el mejor survival desde "Eden Lake" y "Tu eres el siguiente".