Continuando con las enseñanzas de grandes expertos en Felicidad, te presento ahora al Dr. Daniel Siegel, profesor de neurociencia en la Universidad de California en Los Ángeles y autor del libro “The mindful brain” (La mente consciente).
Pensemos en un conductor de autobús que hace felices a los demás saludándoles y animándoles cada día.
¿Qué es lo que ocurre en su cerebro? La Inteligencia Social es utilizar energía e información hacia los demás de forma positiva. Tiene que ver con la empatía (sintonizar con las emociones de los demás), con la resiliencia (el aguante) y con la compasión (preocuparse por los demás).
La Neurociencia ha analizado las “neuronas espejo”, y su papel es sentir, percibir e ir a la acción. Mediante ellas podemos distinguir de acciones sin intención (confusas), que no se imitan, o con imitación, que provocan simulación interna (como tener sed cuando ves a alguien beber). Las neuronas espejo están en el neocórtex (lóbulo prefrontral y posterior). “Cuanto más sentimos nuestro mundo interior, mayor auto-regulación y mayor empatía”. Cuanto más practiquemos la introspección (el mindfulness), más emocional y socialmente inteligentes seremos. Las neuronas que se encienden juntas, conectan juntas.
Dr. Daniel Siegel
Es una perspectiva increíble. Lo que los griegos llamaban “eudaimonia”, una vida con propósito, con sentido, se puede conseguir a través de la introspección, de la reflexión, de la meditación. Es la parte de cerebro en el neocórtex, en el lóbulo prefrontral, aporta las relaciones sanas y felices. En la zona media prefrontral hay nueve funciones que la neuroplasticidad ha demostrado que se pueden modificar amando a otras personas o a uno mismo.
1. Regula el cuerpo de forma flexible: corazón, pulmones, etc.
2. Es importante para el afecto (oxitocina), la conexión con otra persona.
3. Equilibrio emocional: elevación, de modo que la vida tenga sentido, pero sin caer en los extremos (euforia, depresión).
4. La capacidad de extinguir el miedo. Desde la zona media prefrontal, se puede combatir el miedo.
5. La capacidad de no pasar automáticamente de las sensaciones a los impulsos.
6. La habilidad de unir el pasado con el presente y de anticipar el futuro.
7. La empatía: empatía cognitiva (imaginar cómo se siente la otra persona).
8. Moralidad: saber lo que es bueno para el grupo social e iniciar comportamientos, aunque uno esté solo.
9. Ser consciente de la intuición.
Un concepto es la Integración. Cuando un sistema está integrado, conecta de forma armónica con los demás. Cuando no hay armonía, está la rigidez o el caos. La Felicidad tiene que ver con crear Integración (coherencia) en nuestra mente.
En un triángulo formado por mente, cerebro y relaciones, si el triángulo está coherentemente conectado, promueve “eudaimonia” (felicidad con sentido). Podemos promover en las escuelas, por ejemplo, la “educación interna”, desde la introspección y las relaciones sanas.
La Coherencia es lo que puedes sentir dentro de ti mism@, en tus relaciones con los demás y con grandes metas vitales. Es la conexión, la apertura, la armonía. Las personas coherentes están abiertas a las cosas como vienen, respetan las diferencias y se adaptan al cambio.
Fuente: Blog Konekto Empresas.