Jaume Collet-Serra es un director de cine español cuya carrera se ha desarrollado en su totalidad fuera de nuestro país. Entre su filmografía podemos destacar La Huérfana (2009) y Sin Identidad (2011), película que supuso su primera colaboración con Liam Neeson (La Lista de Schindler, Batman Begins, Venganza). En este caso nos presentan Non-Stop un thriller adrenalítico se desarrolla a miles de metros de altitud.
Liam Neeson es Bill, un agente de seguridad aérea quien, durante un viaje sin escalas desde Nueva York hasta Londres, comienza a recibir extraños mensajes avisándole de que cada veinte minutos va a morir un pasajero sino se cumplen sus exigencias. Bill tendrá que luchar contrarreloj para evitar que el terrorista cumpla sus amenazas pero, sobre todo, para demostrar que él no tiene nada que ver con la amenaza a pesar de que las pruebas indican lo contrario...
Pocas veces un título ha hecho tanta justicia como el que tiene ésta. Desde que Bill pone un pié en el avión, empieza un espectácul que no para en ningún momento y la verdad es que es de agradecer que un thriller mantenga tales cotas de tensión e intriga la mayor parte del tiempo. Es cierto que una vez termina la película empiezan a vérsele las costuras al guión por todas partes pero, mientras la ves, convence y, sobre todo, entretiene. Y eso ya es bastante más de lo que suelen provocar las películas de acción contemporáneas.
Liam Neeson lleva sobre sus hombros el peso de la acción y da la talla. La verdad es que en los últimos años se ha reconvertido en un actor especializado en films de acción y se le ve muy cómodo en este tipo de papeles de hombre duro y experimentado que se crece ante unas circunstancias totalmente extraordinarias, como pudimos ver en la citada Venganza o en Infierno Blanco (Joe Carnahan, 2011). Julianne Moore, por su parte, aprovecha cada una de las escenas en las que aparece para recordar porque es una actriz que gusta tanto, mientras que el resto de actores son casi meras comparsas, sobre todo Lupita Nyong'o, que tiene una presencia casi testimonial a lo largo de la película. Esta película la rodó antes de convertirse en la actriz de moda y es evidente que los publicistas han querido aprovecharse de su popularidad para promocionar la película aunque, como digo, su papel es muy pequeño.
Se la recomiendo a todo aquel que tenga ganas de pasar un rato entretenido con una película adrenalítica y repleta de giros de guión. La parte central de la película, en la que todo indica que el personaje de Liam Neeson es el que está detrás de la amenaza, es la más intensa y trepidante y, aunque luego, a medida que vamos descubriendo la identidad del terrorista, decae un poco el ritmo, sigue siendo una cinta de acción aceptable que da lo que promete.Sólo os hago una advertencia, cuando salgáis del cine, sed indulgentes y no le déis muchas vueltas a lo que acabaís de ver porque es la típica película que cuanto más la analizas más se te cae. Limitaos a disfrutar de ella mientras la estáis viendo y luego a otra cosa mariposa, que está bien pero no es nada del otro mundo.