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Noruega: Marta Luisa y Ari

Publicado el 07 marzo 2013 por Pacoadra
El 24 de mayos de 2002 contrajeron matrimonio la Princesa Marta Luisa, hija primogénita de los Reyes de Noruega, con el escritor de origen danés, Ari Mikael Behn.
Noruega: Marta Luisa y Ari
La ceremonia tendría lugar en la tercera ciudad más poblada de Noruega, Trondheim, que fue en la Edad Media capital del país.

Noruega: Marta Luisa y Ari

Vista de Trondheim, y en el centro la Catedral

La novia llegó a la Catedral de Nidaros (antiguo nombre de la ciudad) acompañada de su padre, el Rey Harald V de Noruega, en coche de caballos.
La Catedral, muy restaurada, pertenece a la arquitectura gótica, con fuertes influencias inglesas e importantes reminiscencias románicas.
Es el principal templo cristiano de Noruega y la catedral gótica más boreal. Es considerada como la obra maestra del gótico nórdico.

Noruega: Marta Luisa y Ari

La novia saludando desde el coche de caballos

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La novia con su padre, el Rey Harald V

Al entrar la novia del brazo del Rey en la Catedral, no sonó la marcha nupcial, un coro infantil (60 niños entre 8 y 15 años) cantó un salmo de peregrinos.

Noruega: Marta Luisa y Ari

Momento de la ceremonia 

La Princesa, fiel a su particular estilo, lució un vestido de dos piezas de inspiración medieval, creado por las modistas noruegas Wenche Lyche y por Anna Bratland.
El sencillo vestido estaba confeccionado en crepe de seda blanca, era sin mangas y su escote delantero y en la espalda reproducía los arcos góticos de la Catedral.
 Sobre el vestido lucia un abrigo de satén duquesa color hueso, bordado con cuentas de cristal Swarovski, rematado en cola de tres metros de longitud con forma de arco gótico y bordado con un círculo de cinco lirios (número sagrado, según la tradición Noruega, en un enlace matrimonial).

Noruega: Marta Luisa y Ari

Los novios efectúan una reverencia a los Reyes de Noruega

Su ramo de novia, en forma de corazón, estaba realizado con orquídeas, lirios y una flor típica noruega llamada liljekonvall. Uno de los detalles más llamativos fueron sus alianzas de boda: un diseño en oro blanco de estética gótica con el nombre de los novios grabados en la parte superior de los anillos, realizadas a mano por Ulf Larsen.

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Marta Luisa y Ari salen del templo

Al contraer matrimonio, la Princesa renunció a alguno de sus privilegios, y perdía su tratamiento de Alteza Real, pasando a ser desde ese momento  solo Alteza.
Tampoco la boda se vio libre de los comentarios de la prensa sobre la polémica vida del novio.

Noruega: Marta Luisa y Ari

La Princesa y Ari Behn saliendo de la Catedral

Noruega: Marta Luisa y Ari

La princesa Marta Luisa de Noruega lució una espectacular tiara de diamantes y perlas en forma de lágrimas que en su día perteneció a la reina Maud, quien lo recibió a su vez como regalo de boda de sus padres, los reyes Eduardo VII y Alejandra de Gran Bretaña. 
En realidad la pieza que lució la  princesa es una reproducción casi exacta de la original. La tiara, de un valor incalculable, fue robada en 1993 de la caja fuerte de la prestigiosa firma de joyería Garrad’s de Londres, donde habitualmente se enviaba para su mantenimiento y custodia.
La firma joyera trató de mantener en secreto el robo, pero Scotland Yard prefirió darle gran publicidad para así aumentar las posibilidades de dar caza al ladrón y recuperar la pieza. La tiara nunca se encontró y la firma joyera junto a su seguro realizaron una réplica
La diadema formada por perlas y diamantes posee un adorno frontal que puede separarse de la base de la tiara, que puede lucirse por separado, más sencilla, pero con igual belleza. La princesa Marta Luisa lució esta tiara precisamente sin ese adorno frontal en forma de estrella u hoja de tres puntas redondeadas que señalábamos

Noruega: Marta Luisa y Ari

Los novios recorriendo la calles de la ciudad

Tras la ceremonía, los novios se trasladaron al Palacio que el Rey posee en Trondheim, construidos en el siglo XVIII, está considerado una de las más fascinantes construcciones de madera de Escandinavia, en él se combina el estilo propio de la arquitectura noruega con elementos neoclásicos y detalles rococos.

Noruega: Marta Luisa y Ari

Los novios saludando desde el balcón


Noruega: Marta Luisa y Ari

El esperado beso de los recién casados

Antes del banquete, los novios posarían para las fotos oficiales, incluida la tradicional "foto de familia" con los representantes de las Casas Reales asistentes a la boda.

Noruega: Marta Luisa y Ari

Foto Oficial


Noruega: Marta Luisa y Ari

Foto de Familia

Los representantes de las Casas Reales fueron:
DinamarcaReina Margarita IICondes Flemming y Ruth de Rosenborg
SueciaPrincesa VictoriaPrincesa MagdalenaPrincesa Cristina y Tord Magnuson
BélgicaPrincesa Astrid y Archiduque LorenzPríncipe Laurent
HolandaPríncipes Guillermo y MáximaPríncipes Constantino y Laurentien
Reino UnidoPríncipes Eduardo y Sofía, Condes de Wessex
EspañaPríncipe Felipe de Asturias
LuxemburgoPríncipe Heredero GuillermoPríncipes Guillermo y Sibilla
JordaniaPrincesa Sumaya y Nasser Jedeh
GreciaPríncipe NicolásPrincesa Alexia y Carlos Morales

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La Princesa sin el abrigo que cubría el vestido nupcial a su entrada al banquete


El exquisito menú consistió en trucha tartar con espárragos frescos y huevos escalfados de codorniz, noisette de ternera con verduras de primavera, quesos de cabra calientes y, como postre, helado bábaro de vainilla con frambuesas y salsa de granadina.
Como dato curioso, decir que la flor del Lirio estuvo presente en todo el acto. Las mesas redondas estaban adornadas, cada una de ellas, con un centro floral forrado con hojas de lirio. El ramo de la novia también fue confeccionado con esta flor. Al igual que la decoración de la catedral.
Noruega: Marta Luisa y Ari

La boda resultó tan cara para el ayuntamiento de Trondheim que tuvo que pedir ayuda urgente al Estado para sufragar los gastos.El desembolso más importante era la fiesta popular, ya que los gastos de los invitados, así como los de la boda en sí, los pagaba el Rey.
Existieron voces descontentas de que se considerara la boda como una "boda de estado", ya que en la misma la Princesa perdía su tratamiento de Alteza Real.

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