Esta semana ha estado cargada de noticias:
Mucha teoría, poca práctica: sólo una de cada tres españolas se cuida: las que más lo hacen, las navarras (40%) y las que menos, las asturianas (20%). Es curioso ver cómo una empieza a cuidarse con la edad, sobre todo a partir de los 55 años, tal vez sea porque empiezan a aparecer problemas que alarmen y… ¿por qué esperar a que éstos hagan acto de presencia? ¿no será mejor prevenir que aparezcan? No puede ser que un 18% de las mujeres diga que no cuida su higiene… No hace falta ir 2 horas diarias al gimnasio ni vivir a dieta estricta, simplemente hacer ejercicio de forma regular, alimentarse equilibradamente y no saltarse las revisiones médicas que toquen. Por supuesto, el sueño es muy importante y el 63% duerme sólo de 5 a 7 horas.
Sexualidad y embarazo: me gustan mucho los últimos puntos del artículo, los consejillos para disfrutar de la sexualidad durante la gestación. Yo le quitaría la coletilla, porque el coito, se esté embarazada o no, sin esos puntos, se queda en un suficiente. Todos esos consejos lo enriquecen para llegar a la matrícula de honor.
Las niñas que nacen con bajo peso tienen el doble de posibilidades de ser infértiles de adultas: se basa en un estudio con más de 1.200 mujeres y no tienen clara la causa de este fenómeno, tal vez se relacione el retraso del crecimiento con la falta de madurez de los órganos reproductores. Habrá que esperar más estudios que arrojen nuevos datos. Lo que dicen al final es intrigante… de confirmarse finalmente esta asociación, se prevé un aumento de casos de infertilidad en un futuro, puesto que gracias a los avances médicos, cada vez más niños con bajo peso al nacer salen adelante.
Las señales de alarma de la incontinencia urinaria: el 25% de las mujeres sufre de incontinencia pero… hasta un 80% no consulta con un profesional por vergüenza o por considerarlo como algo normal. Lo preocupante es que esta cifra es para mayores de 35 años. A partir de los 50, sube al 50%. No es normal que se escapen unas gotitas de pis al reír, al coger peso, al estornudar o toser… Esto afecta a la vida diaria de las mujeres y además es un problema que siempre va a más. Tiene tratamiento, pero es mucho más sencillo prevenirlo diariamente con ejercicios de Kegel.
El riesgo de sufrir cáncer de ovario aumenta con el sobrepeso: en este caso una dieta sana y ejercicio regular, disminuye un 6% el riesgo de desarrollar un cáncer de difícil pronóstico, puesto que en el 80% de los casos se detecta demasiado tarde para aplicar un tratamiento satisfactorio. Otros cánceres asociados al sobrepeso son: útero, mama y colon.
Cirugía segura u eficaz para el prolapso de órganos pélvicos: más a favor de los ejercicios de Kegel. Un prolapso es el descolgamiento de un órgano abdominal que “cae” hacia la vagina. El más frecuente suele ser el de vejiga. Esto se evitaría con un buen tono muscular del suelo pélvico. Los ejercicios de Kegel no cuesta nada hacerlos y estiman que un 20% de las mujeres deberá someterse a una cirugía para corregir un prolapso. Si se puede evitar… mejor que mejor.
Un nuevo tratamiento mejora la supervivencia de las pacientes con cáncer de cérvix: reduce el riesgo de muerte un 30% y aumenta la supervivencia en 4 meses. Puede parecer poco, pero es que la supervivencia de este tipo de cánceres es de sólo un año. Aquí sí que es importantísima la prevención. Las citologías no se pueden dejar pasar jamás. Os hablo de la prevención de este cáncer aquí y aquí.
Depresión postparto, más habitual y más grave de lo que parece: hasta un 80% de las mamás recientes desarrollan una depresión leve. En el artículo vienen detallados los síntomas y cuándo aparecen. No veo justo que se presione a las madres a ser absolutamente felices en sus postpartos. Los desajustes hormonales y el fuerte cambio personal que implica la adaptación a la nueva situación hace que sea más normal y frecuente estar deprimida que no estarlo (¡sólo un 20% se libra!). Si pensáis que no estaréis dentro del 20% de las que deberán operarse de un prolapso… ¿qué le hace pensar a la gente que una mamá no desarrollará una depresión postparto? el apoyo y la atención profesional son imprescindibles desde que comiencen a detectarse los primeros síntomas. Y desde luego, no es una situación para avergonzarse en absoluto, si ocurre, se consulta, se trata, se pasa y santas pascuas.
Un bebé debería saber dormir con mes y medio de vida: perdonad que me ría, pero ¿qué pasa, que hasta que no cumpla mes y medio el pobre va a estar despierto? Quería compartir este artículo con vosotras para que veáis cómo, aunque el propio Estivill (os hablo de su método aquí) haya reculado y admitido que pretender enseñar a dormir a un bebé puede ocasionar serios problemas de autoestima y seguridad en su edad adulta, sigue habiendo “entendidos” que afirman que es lo que hay que hacer, enseñar a dormir. Por cierto, que si tenéis más de 3 años y dormís siestas, no sois normales, según este señor. Leer para creer.
Y finalizo con este artículo. No es noticia, pero me ha gustado mucho y quería compartirlo también aquí: 10 errores comunes que cometemos los padres de hoy en día, os va a gustar.
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