Romeo Santos subió la noche del lunes al escenario
del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, en Chile, y
tal fue la acogida que se llevó dos antorchas y Gaviota de Plata y
Gaviota de Oro en la apertura de la segunda jornada de actividades.
Luego, Daddy Yankee tuvo una presentación de dos horas, junto a 30
bailarines, llevándose la misma cantidad de premios.
El público
femenino deliró con Santos, según reporta la agencia AP. Sentado en un
trono dorado —mismo color que su micrófono— y emulando a un monarca,
Romeo arremetió contra aquellos que lo critican: "Que sigan criticando,
pero el rey sigue siendo rey. Vivan sus vidas como quieran y no dejen
que nadie se meta con su privacidad".
En
medio de la interpretación de "No le digas a nadie", tema que habla
sobre la infidelidad, Santos detuvo la música y acabó por ganarse a las
"féminas" —como denominó a sus fanáticas— al sentenciar que "el hombre
es infiel por estúpido, por arrogancia, por pasatiempo. Pero la mujer es
infiel por amor y por venganza".
Tras esta exitosa presentación
en Viña del mar, el cantante publicó en su cuenta de Twitter una imagen
combinada en la que se lo ve en el escenario y se ven también los
premios que obtuvo. “Gracias Chile. El rey sigue siendo rey”, escribió
junto a la foto.
En el caso de Daddy Yankee, fueron cerca de
15,000 las personas que disfrutaron de sus éxitos. Con gorra negra y
gafas de sol, el cantante convirtió el lugar en una enorme fiesta, de
acuerdo con la agencia de noticias EFE.
"Quiero agradecer a esos
fans que a pesar de no venir tan seguido a Chile no me olvidan y me lo
demostraron en la presentación de anoche. También agradezco a Dios
porque a través de todos mis años de carrera ha sido un compañero fiel",
sostuvo el intérprete.