Novelas de Hombre Lobo: The Silver Crown

El rey de los Colmillos Plateados ha muerto... ¡Larga vida al rey!
El conflicto interno desgarra la Tribu mientras dos hombres lobo pelean por el trono. Lord Albrecht fue exiliado de la corte hace tiempo, pero tendrá que regresar para reclamar el trono de su abuelo pues, de lo contrario, su corrupto primo Arkady obtendrá el liderazgo de los Colmillos Plateados... poniendo a la Tribu entera en manos del Wyrm.
Albrecht deberá embarcarse en un peligroso viaje a través del mundo espiritual para recuperar la reliquia de la más noble entre las Tribus de Gaia, largo tiempo perdida: la Corona de Plata.

Así se presenta The Silver Crown (La Corona de Plata. White Wolf Publishing, 1995), la segunda novela ambientada en el universo de Hombre Lobo: El Apocalipsis (la portada indica que está basada en Rage, el juego de cartas basado, a su vez, en Hombre Lobo), publicada por la compañía del lobo blanco hace ya la friolera de veintitres años. A diferencia de las posteriores Novelas de Tribu, las cuales toman el relevo como hilos conductores de la metatrama oficial del juego hasta su conclusión final en Apocalipsis, todas publicadas por La Factoría de Ideas, The Silver Crown no vería la luz en castellano. Y resulta curioso, siendo en ésta novela donde se origina dicha metatrama.

¿Qué historia nos cuenta The Silver Crown? Nada menos que el ascenso de Lord Jonas Albrecht al trono de los Colmillos Plateados del Protectorado de Tierra del Norte y el hallazgo de la Corona de Plata, a la sazón el símbolo que señala a su portador como rey de toda la Nación Garou por designio de Halcón y de Gaia, uno de los fetiches más poderosos que existen.

Juguemos a dar por hecho que alguno de los que leéis este blog sois jugadores noveles de Hombre Lobo que os estáis iniciando en él con la edición 20 aniversario en la mano. ¿Dónde, pues, se menciona todo esto en dicho manual? Pues en ninguna parte. Albrecht aparecía en los libros de las ediciones anteriores como uno de los personajes icónicos del juego, al igual que sus compañeros de manada Mari Cabrah y Evan Curandero-de-Pasado, y muchos otros. La metatrama de Hombre Lobo nunca llegó a ser, por suerte, tan vasta y embrollada como la de Vampiro, pero proporcionó también un amplio conjunto de nombres y relaciones entre personajes y clanes Garou. Sin embargo, en la edición 20 aniversario no se proporciona información o actualización para ella, por lo que toda esta historia os puede sonar a chino, y difícilmente podréis conocer más sobre ella a menos que consultéis wikis en internet o tengáis acceso a los suplementos y novelas de las ediciones anteriores. Por ello, hablemos un poco más de sus protagonistas.

Albrecht es un Ahroun de los Colmillos Plateados, nieto del monarca anterior, Jakob Morningkill, el cual lo exilió de su corte llevado por la paranoia, acusando la falta de contención del joven Garou ante lo que éste identificaba como desvaríos de su abuelo. Es un buen ejemplo del típico héroe americano: socarrón, buen guerrero, arrogante y algo ignorante, con tendencia a actuar por su cuenta y saltarse las convenciones y tradiciones a la torera pero leal a sus amigos, consciente de su deber a su manera y dispuesto a actuar como se espera de él llegado el momento de la verdad. Siempre me ha recordado un poco al agente Seeley Booth de la serie Bones.

Su némesis es Lord Arkady Garra-de-Hielo, otro Ahroun de los Colmillos Plateados procedente de Rusia y pretendiente al trono de Morningkill. De éste Garou se dice que es el hombre lobo de sangre más pura sobre la faz de Gaia, ya que procede de un linaje de héroes y su pelaje es de un blanco plateado inmaculado. Arkady escapó de Rusia atravesando el Telón de Sombras - una barrera mística, levantada por la Matusalén Nosferatu Baba Yaga, que separó Rusia del resto del mundo durante la época de la Guerra Fría y un poco más allá -, siendo el primer y único Garou que conseguiría hacerlo y vivir para contarlo. Sin embargo, para lograrlo hubo de llegar a un pacto traicionero con agentes del Wyrm, algo que acabaría marcando su vida.

Ambos personajes ganarán en definición en novelas posteriores - aparecen tanto en las novelas de Tribu como en Apocalipsis -, si bien Arkady es, para mi, el más interesante de los dos, ya que Albrecht es un personaje demasiado estereotipado como para resultar atrayente en exceso.

¿Merece la pena la historia que se nos cuenta en esta novela? Con sinceridad, depende de si os interesa el trasfondo oficial de Hombre Lobo o no, porque como novela es un poco floja. Bill Bridges ha escrito a posteriori mejores historias para el universo de Hombre Lobo en las que consigue sumergirte mejor en su universo de lo que lo logra con The Silver Crown. La estuve buscando durante bastante tiempo porque quería conocer los detalles de cómo había reaparecido este mítico fetiche, pensando que me encontraría una buena historia acerca de una búsqueda compleja y difícil, pero mis expectativas no se vieron del todo cumplidas. No es que la búsqueda no tuviera mérito, pero, entre otras cosas, la ubicación final del fetiche más poderoso de los Colmillos Plateados [SPOILER] (una sala del trono abandonada entre los túneles del metro de Nueva York) [SPOILER] se me hizo un tanto absurda. El mayor interés de la novela es conocer el trasfondo de la corte de Albrecht y el origen de su enemistad con Arkady, una relación que como ya he dicho se sigue desarrollando en novelas posteriores y que tiene una profunda influencia en el trasfondo oficial de Hombre Lobo. Sus 250 páginas se leen rápido, pero eso si, tiene que ser en inglés. No es fácil conseguirla por un precio razonable, a pesar de que ahora es más fácil poder comprar libros de más allá del charco, pero tampoco es imposible. Yo conseguí mi copia por unos 20€ en total, pero lo habitual es que suba más. También es posible encontrarla en pdf en internet.

Este año me he hecho con los que considero los mejores títulos que se publicaron en EEUU y no llegaron a España del universo de Hombre Lobo, así que a medida que los vaya leyendo os iré hablando de ellos. Entretanto, que Selene no deje que se apague la llama de la Rabia en vuestro pecho.