¡Hola a tod@s de nuevo! ¿Hacía tiempo que no nos veíamos eh? Una serie de catastróficas desdichas (o todo lo contrario, trabajo y vacas) me han tenido apartado de estos lares, pero al final todo lo bueno se acaba y he vuelto a tener tiempo para manchar cosicas.
Tras empezar a pintar los marines de plaga de la nueva caja de Warhammer 40,000 me paré a pensar y caí en que prácticamente ya tenía de todo lo que venía en ella, por lo que a medio camino me decidí a pintar una de las nuevas tropas mas espectaculares del ejercito, "el campanero".
Un figurón lleno de detalles y que con un poco de trabajo queda perfecta. Campanas colgadas por todo el cuerpo para proclamar la llegada de la Guardia de la Muerte, el nurglete colgado de un cuerno que sale del generador, los incensarios llenos vete a saber tú de que.
Tras buscar y buscar por tutoriales reencontré mi antigua receta de la Guardia de la Muerte, básicamente pinceles secos de hueso y blanco sucio alternados con lavados de Agrax y Sepia, y aún tengo que atreverme con desconchones hechos con esponja. Mis nurglosos volverán a ser de sus colores originales.
Aunque la figura en si ya me está acabada es cierto que se me quedó en la mente algún detalle por añadir: algún tipo de diseño en el mandil, la rodillera derecha del mimo verde que las hombreras para indicar un nivel superior en el escalafón, charcos de algún tipo de líquido verde en la peana (había pensado hacerlos con verde camo y barniz brillante), cosicas que con el ansia de barnizarla para tenerla preparada para la próxima partida se me quedaron en el tintero.
Desde este ángulo se descubre el gran fallo, ¡la rebaba de la pistola de plasma! La descubrí demasiado tarde. En definitiva, las nuevas miniaturas de la Guardia de la Muerte son brutales, casi le hacen a uno repensarse lo de seguir utilizando sus antiguos marines de plaga...
¡Saludos y seguid pintando!