Los padres a veces se quejan del maravilloso calendario laboral que tienen los profesores: vacaciones de Navidad, todo el verano, puentes, etc. Pero lo cierto que es una profesión con mucha responsabilidad y muy exigente en diversos apartados. Es fácil de imaginar que lidiar con varias decenas de niños para que les presten atención y les oigan debe ser una tarea agotadora. Si es complicado con los hijos, con toda una clase... Y evidentemente tiene consecuencias.
Una de ellas es que nueve de cada diez maestros de infantil ha sufrido al menos una disfonía vocal en toda su carrera. La encuesta 'La Voz Docente' así lo muestra. Esta encuesta preparada por la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, recoge los datos de 700 profesores que la han realizado en toda España.
De todos los encuestados, el 81,79% han sufrido de disfonía. Pero son los de infantil los que más sufren, seguido de los de primaria con un 85,29%. Se puede asegurar que las cifras mejoran con el aumento de la edad de los alumnos con un 78,61% de profesores de secundaria, 75% de bachillerato y 85,29% de FP. Además, se resalta que los más afectados son los maestros que ejercen su carrera en Castilla-La Mancha, Extremadura y Canarias.
De la población general solo una de cada 13 personas sufre problemas en la voz, pero en ciertos colectivos las cifras aumentan. "Los profesionales de la enseñanza son uno de los grupos laborales con más riesgo de patologías de la voz ya que no han tenido ningún tipo de formación en técnicas vocales por lo que están muy expuestos a molestias que afectan a su calidad de vida y pueden provocar muchas bajas laborales", explica el doctor Juan Carlos Casado.
Pese a la prevalencia de estas patologías, l os profesores españoles no acuden ni al otorrinolaringólogo ni al logopeda para evitar recaer en el abuso vocal. "El 66% de los profesores españoles no han visitado la consulta de Otorrinolaringología y menos aún (71,82%) han ido a un logopeda para aprender técnicas vocales", destaca el doctor Pedro Cabrera, vocal de la comisión de la Comisión de Laringología, Voz, Foniatría y Deglución de la SEORL-CCC, que ofrece el siguiente consejo: "Quienes trabajan con la voz, deben acudir a un especialista si padecen una ronquera que dure más de 15 días, y si fuman a los 10 días".
Malos hábitos que provocan la disfonía
Por otra parte, los encuestados enumeran las siguientes causas como origen de sus patologías: hablar por encima de los alumnos (58%); hablar de forma constante (28%) y no hacer descansos (13%). Desde la SEORL-CCC, recomiendan a los docentes un cuidado de la voz. "Se debe descansar la voz con períodos de silencios de 15-20 minutos 2 o 3 veces al día, limitar en la medida de lo posible el uso del teléfono, y no hablar más de 4 horas seguidas ni cantar más de 2", añade el doctor Cabrera.
La disfonía no está considerada una enfermedad laboral para este colectivo y el 67% de los docentes no cree que la disfonía se tenga en cuenta como uno de los riesgos en la prevención de riesgos laborales. Diferentes estudios indican que los maestros notan los efectos del abuso vocal con solo una semana de impartir clases, algunos profesores perciben un empeoramiento progresivo de su voz a lo largo del día o de la semana.
Para concienciar sobre la voz del docente, la SEORL-CCC ha puesto en marcha una iniciativa en centros escolares, donde alumnos y profesores han guardado un minuto de silencio durante sus clases.
El Día Mundial de la Voz se celebra con el objetivo de concienciar sobre la importancia de los cuidados de la voz y las distintas patologías que pueden afectar a las cuerdas vocales. Su celebración se inició en 1999 por iniciativa de la Federación Internacional de Sociedades de Otorrinolaringología y en España está coordinado por la SEORL-CCC. El lema de este año es ' Tu voz importa'.
Decálogo de consejos para cuidar la voz
Para prevenir las patologías de la voz, la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) recomienda el siguiente 'Decálogo de consejos para cuidar la voz':
No hablar en ambientes ruidosos. No se debe hablar sobre un fuerte ruido ambiental, pues es un comportamiento de abuso vocal. Algunas alternativas pueden ser: hablar de frente al interlocutor, articular más de lo habitual y hablar claro y lento para evitar repetir.
No fumar. El tabaco es un factor irritante para la laringe. El humo pasa entre las cuerdas vocales y predispone para que aparezcan lesiones benignas como edemas o pólipos. Además, es la principal causa de cáncer de laringe.
No chillar ni hablar gritando puesto que es un comportamiento de esfuerzo vocal. Debemos acomodar nuestro uso de la voz a nuestras posibilidades reales y conocer las posibilidades de nuestro aparato fonador para saber hasta dónde se puede llegar sin realizar esfuerzo. En general, se debe descansar la voz haciendo periodos de 15-20 minutos de silencios dos o tres veces al día, limitar el uso del teléfono, entre otras medidas. En general, no se debe hablar más de 4 horas seguidas ni cantar más de 2 horas.
Vocalizar y respirar bien: es necesario vocalizar bien y respirar de manera cómoda para evitar forzar y elevar la voz. Sobre todo en profesiones donde el uso de la voz es continuo, como la de los profesores.
'Carraspear es traumático para las cuerdas vocales'
Hidratarse correctamente: beber unos dos litros de agua diarios para que la mucosa que recubre a las cuerdas vocales esté bien hidratada.
Descansar de forma adecuada. La fatiga corporal se refleja en la voz. Se debe descansar para obtener el máximo rendimiento vocal. Hay que dormir más de seis horas, y descansar antes de utilizar mucho la voz, especialmente en los profesionales de la voz.
No utilizar el aire pulmonar residual al hablar. Nunca se debe hablar con el resto final de aire y sentir sensación de ahogo. Es un comportamiento de esfuerzo. Esto ocurre cuando se marcan las venas del cuello al hablar.
Evitar los irritantes laríngeos como el humo y las áreas polvorientas. Evitar, también, hablar en ambientes muy secos: la sequedad ambiental quita protección a las cuerdas vocales. Es conveniente utilizar un humidificador, evitar los ambientes con mucha calefacción o aire acondicionado, abrir y ventilar las habitaciones para renovar el aire.
No carraspear. El carraspeo es un comportamiento de esfuerzo traumático para las cuerdas vocales. Es un movimiento fuerte y violento. Algunas alternativas para evitarlo pueden ser: tragar saliva, beber pequeños sorbos de agua, realizar una tos sorda (sin juntar las cuerdas vocales).
Realizar controles periódicos de la voz, con el otorrinolaringólogo. Y consultar siempre que una disfonía se mantenga más de 15 días.