Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de
Boston, en colaboración con investigadores de la Universidad de Nagasaki, la
Universidad de Tokushima Bunri, la Universidad de Kagoshima y el Instituto de
Investigación Biomédica de Texas plantearon que el medicamento amodiaquina, que
se usa normalmente para tratar la malaria, podría proporcionar un nuevo
enfoque terapéutico para tratar a los pacientes infectados con ébola. Ellos investigaron
exactamente qué partes de la molécula de amodiaquina inhibían la infección por
el virus del Ébola. Sus hallazgos, publicados en Antiviral Research,
muestran que los derivados modificados de la amodiaquina son significativamente
menos tóxicos y casi 10 veces más efectivos para bloquear el virus del Ébola
que la fórmula original de amodiaquina. El medicamento interfiere con la
digestión celular normal, bloqueando la infección por el virus del Ébola.
Cuando se modifican dos partes particulares de la molécula de amodiaquina, la
potencia contra el virus aumenta aún más. Los científicos están dando los
siguientes pasos en el camino del desarrollo de una terapia que pueda ser aprobada.