Revista Comunicación
Ya tenemos nuevo gobierno y los que nos temíamos un cambio, pero no un cambio positivo, vemos como nuestras sospechas se acrecentaban.
En un escenario de crisis y de necesidad de actuaciones urgentes, que el PSOE hizo mal y a destiempo, todos imaginábamos que el paquete de medidas del PP, sería rápido, contundente y estaría preparado. Pues no, las medidas estructurales y de reforma van a esperar un tiempo mas, al menos hasta enero.
El pretexto del desconocimiento real de las cuentas del estado son excusas de mal pagador, dado que normas fundamentales que hay que revisar como la laboral, ley de creación de empresas, ventajas fiscales a la contratación, normas para la de participación en el capital empresarial tipo business angels, RETA proporcional al tiempo de trabajo y otras interesantes propuestas, son ajenas e independientes de las cuentas estatales. Mucho me temo que no las aplicaran o se quedaran en un brindis al sol.
Sin embargo si han corrido para anunciar medidas que no son económicas y si ideológicas, como la reforma de la ley del aborto, la apertura de una investigación del 11-M para “que se sepa la verdad” y se mantiene el recurso contra el matrimonio gay. Como todo el mundo sabe, en esta situación critica de la economía son los temas que realmente preocupan al ciudadano.
Los ministros electos, si bien hay que dejarles los 100 días de cortesía, de momento algunos de ellos tienen un currículo poco edificante, el de defensa ha sido recientemente asesor en una empresa fabricante de bombas de racimo y el de economía es un hombre de Lemanh Brothers, vamos la zorra cuidando a las gallinas.
El resto y en su mayoría son personas formadas en la universidad opusina y jesuita, salvo 3 excepciones que por si solo no dice nada pero sumado a las medidas “realmente urgentes” anunciadas, nos da la imagen que el problema económico es global, y no era de ZP, que las medidas económicas vendrán marcadas por los mercados, el FMI y el BCE, es decir no ganamos nada frente al gobierno anterior, pero si tendremos gobierno ideológico conservador que harán política con las libertades individuales.
Ah, y felices fiestas.