Internet es un peligro. Creo que muchos estaremos de acuerdo que con el boom de internet, redes sociales, los blogs... ver cosas bonitas constantemente perjudica seriamente la salud. Cada dos segundos recibes una newsletter con mil cosas que querrías comprar; entras en un artículo con galería de propuestas que te lleva a los blogs o webs correspondientes del producto que te fascinó y entras en bucle (sí, soy una mujer de bucles).
Y así no se puede vivir. Listas y más listas de deseos, de posibles regalos, de... acumular mentalmente todo lo que nos compraríamos con un solo click. Cosas que quizá nunca compraremos, pero que nos encandilan y nos miramos durante horas. Cosas requetebonitas que guardamos en un borrador de email, en una lista de Evernote, que mandamos por WhatsApp para comentar lo bonitas que son y posts en el blog para de algún modo, inmortalizarlas, aunque nunca lleguen a casa, que al menos, estén en tu otra casa.
1. Vestido de Vanessa Bruno
2. Biquini (no recuerdo la firma)
2. Pantalones de algodón de Zara
1. Libretas Moniquilla de Madewithlof
2. Bolso bandolera de piel de Beatriz Furest
3. Caja para pasteles de madera de PieBox
4. Colgador de Mimub
5. Cestos para almacenaje (encontrado por la red, en algún que otro bucle de los míos)