Solamente de esta manera recuperaremos la confianza en las instituciones, lo suficiente como para soportar los rigores de la crisis estoicamente e incluso colaborar en el mantenimiento del sistema.
1.- Se precisa tener trabajo previo, y fijo a ser posible (la política debe ser un medio para ayudar a la sociedad y no un fin para sobrevivir o incluso lucrarse)
2.- Deberás tener, previamente, una remuneración mayor o igual a la prevista por la representación ciudadana (se acabó la falacia de la retribución para conseguir a los “mejores”, la competitividad y la eficacia se conseguirán por méritos propios y no mediante dispendios electorales)
3.- No se añadirá ningún privilegio económico o en especie, actual o futuro (ni manutención, ni alojamiento, ni seguros sociales extras, ni pensiones vitalicias…)
4.- Imprescindible DECIR SIEMPRE LA VERDAD (no su verdad, ni la que piensan que queremos oir, sino la verdad, que solo es una)
5.- Se procederá a retirar el pegamento especial que tienen los sillones de los políticos en el culo (tan fácil debe ser conseguir el sillón como dejarlo)

6.- Aceptar la imposibilidad de acumular puestos en comités, consejos de administración, empresas públicas…etc. salvo que carezcan de remuneración de ningún tipo.
7.- Deberá jurar por “el niñito Jesús” o por “Snoopy” que las labores asignadas a la administración deberán realizarlas los funcionarios, que para eso están. Los mismos que existan a la entrada serán los que existan a la salida. (Ya basta de asesores, gabinetes, colaboradores, correveidiles, subvicenoseques…)
8.- Se acabaron las comidas de trabajo pagadas por el erario público (si quieres comer, come, y te lo pagas de tu bolsillo y si quieres trabajar lo haces en el despacho como todo el mundo).
9.- Obligatorio FIRMAR sin pseudónimo las propuestas y las acciones que se lleven a cabo, tanto para ser felicitados como para depurar, en su caso, responsabilidades.
10.- La responsabilidad civil la ostentará el propio sujeto y la ética y política se repartirá con los padrinos del partido correspondiente.
11.- El programa, como declaración de intenciones será para cumplirlo, si ello no es posible volverá a la casilla de salida o a sus cuarteles de invierno.
12.- Ni que decir tiene, que se asistirá todos los días al trabajo (solo faltaba) y los tres primeros días de ausencia se cobrará el 50%, los 15 siguientes solo el 75% (la medicina de los mortales se aplicará también a los que las deciden)
13.- Por último se impone la eliminación de los dos primeros sobres preparados, del trío (el primero, échale la culpa al anterior y el segundo, échale la culpa al sistema). Con los mimbres que se tengan se confeccionará el cesto
