El actual presidente de Estados Unidos, Barak Obama, ordenó aumentar el volumen de ciberataques contra Irán. Obama decidió aumentar los esfuerzos de una iniciativa de George Bush y asediar los sistemas de Irán para intentar frenar su desarrollo nuclear. Entre las campañas de ciberarmas que Obama aprobó se encuentra Stuxnet, virus que se desarrolló con la colaboración de Israel. En 2011 los sistemas informáticos de Irán, sobre algunos relacionados con su programa nuclear, sufrieron varios ataques informáticos importantes. Stuxnet fue el virus que protagonizó el ataque más significativo, que llegó a afectar a parte de las centrifugadoras del programa nuclear. La complejidad del virus hizo que los expertos buscasen su origen de forma masiva, pero nunca llegó a saberse su procedencia. Tras la aparición de Stuxnet, se especuló con que podría ser fruto de un proyecto conjunto entre el ejército de Estados Unidos y el de Israel, que buscarían inutilizar los sistemas iraníes para frenar su desarrollo nuclear y dificultar una posible acción de guerra contra Israel. Sin embargo, hasta ahora no había habido confirmación de que estos países estuviesen detrás de Stuxnet. Un año después, el diario The New York Times apunta directamente a Barak Obama como el responsable de autorizar el desarrollo y la utilización de Stuxnet y otras ciberarmas. El diario cita a personal del programa de desarrollo de estas iniciativas para confirmar que Estados Unidos e Israel fueron los responsables de los ataques contra Irán. Las fuentes no han sido identificadas por cuestiones de seguridad. Según dichas fuentes, Barak Obama, después de suceder a George Bush, se encontró con un programa denominado 'Olympic Games', enfocado al desarrollo de ciberarmas. Obama decidió aumentar los recursos a este plan y autorizó de forma directa que se realizasen ataques contra los sistemas iraníes. Entre Estados Unidos e Israel desarrollaron distintas ciberarmas, entre las que destacó Stuxnet. Este gusano consiguió causar daños en los sistemas nucleares de Irán, objetivo principal de la ofensiva. Estados Unidos e Israel perseguían frenar lo máximo posible la campaña de desarrollo nuclear de Irán, al mismo tiempo que pensaban debilitar al país ante un posible ataque contra la propia Israel. Tras realizar los ataques con Stuxnet, virus que se asegura que tiene un código 50 veces más complejo que un malware normal, los analistas aseguraron que se había conseguido retrasar en aproximadamente 18 meses el desarrollo nuclear de Irán. Por su parte, Irán aseguró que había conseguido controlar Stuxnet y que el virus no había afectado a sus sistemas. Las fuentes de The New York Times confirman así que Estados Unidos, que ya había anunciado el desarrollo de ciberarmas, habría realizado su primer ataque en la Red. Pese a que el proyecto lo inició George Bush, Obama sería el responsable de haber coordinado las acciones y haber dado las órdenes directas para su aplicación. Fuentes: New York Times, Europa press.