Una belleza medieval
Pasear por distintas localidades de Portugal, ha sido una gran satisfacción. Y uno los puntos destacados ha sido conocer la ciudad amurallada de Óbidos.
Es un castillo y un pequeño pueblo en su entorno, todo rodeado de unas magníficas murallas defensivas.
En la entrada a la ciudad se destaca un acueducto del año1570. Dentro de las murallas, el programa es muy simple, es cuestión de recorrer las callejuelas peatonales empedradas, dejándose llevar por la curiosidad y también visitar los numerosos locales comerciales, donde ofrecen azulejos, filigranas de oro, comidas regionales, etc.
Ginja
Como muchas localidades, Óbidos tiene su producto estrella, que todos recomiendan saborear: es la "ginja o ginjinha", un licor de guindas, una fruta emparentada con el cerezo silvestre, que se sirve en unos "vasitos" de chocolate, los que se comen luego de saborear el licor.
Aprovechando el ambiente, se celebran "festivales medievales" frecuentemente.
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