En realidad cualquiera de estos métodos puede funcionar dependiendo de las características, del empleador y del seleccionador. Porque los seres humanos somos complejos, únicos, diferentes, cambiantes, adaptables y es muy difícil encerrarnos en una etiqueta, en un paradigma o un único procedimiento.
Así que para algunas personas puede funcionar perfectamente el método científico, cuantitativo, estadístico, psicométrico para hacer la selección del personal porque esto les da seguridad en que el proceso que están realizando es objetivo, imparcial y que su respuesta al contratar al candidato ideal son las más acertadas. Mientras que otras personas con características de personalidad distintas se dejan guiar por la intuición, por una corazonada, por un análisis cualitativo o por la impresión que le da un candidato en un determinado momento aun si no cumple con los criterios establecidos en un manual. Esto no quiere decir que una metodología sea mejor que la otra, sino que funcionamos de manera diversa, de manera diferente y como reclutadores debemos ser observadores para conocer las características de nuestro cliente y ajustar el método que más se adecue con lo que le hará sentir más seguro a la hora de guiarlo en el proceso de selección de personal.Debemos también ser flexible para no encerrarnos en un solo método o estrategia en el proceso de selección, sino ver diferentes alternativas que se ofrecen dentro del área de recursos humanos o de la psicología organizacional, e incluso ser lo suficientemente adaptativos y creativos para idear formas alternativas de seleccionar personal específico, sobretodo en aquellos casos de cargos de alta responsabilidad para la empresa, o para aquellos clientes difíciles que no se dejan convencer fácilmente por los métodos tradicionales.Así que como reclutadores y seleccionadores, invito a las nuevas generaciones a ser observadores, flexibles y creativos para lograr la optimización de sus procesos, la satisfacción del cliente y la buena ubicación en un cargo con potencial de sus candidatos evaluados.