Revista Cine
Mike Banning (Gerard Butler) es un agente del Servicio Secreto estadounidense que, tras un accidente de coche en el que únicamente puede salvar la vida del Presidente Asher (Aaron Eckhart), decide dejarlo para trabajar en el Departamento del Tesoro. Pero cuando un comando coreano liderado por Kang (Rick Yune) ataca la Casa Blanca, tomando como rehenes al Presidente y su gabinete, Banning se verá obligado a entrar de nuevo en acción.
Ficha:
Título Original: Olympus Has Fallen.
Director: Antoine Fuqua.
Guionistas: Creighton Rothenberger, Katrin Benedikt.
Intérpretes: Gerard Butler, Aaron Eckhart, Morgan Freeman, Dylan McDermott, Ashley Judd, Radha Mitchell, Melissa Leo, Cole Hauser, Angela Bassett, Han Soto, Robert Forster, Rick Yune, Arden Cho, Sean O'Bryan, Tory Kittles, Jason Yee, Amber Dawn Landrum, Morgan Jaye Williams, Danny Le Boyer.
Productores: Gerard Butler, Ed Cathell III, Mark Gill, Alan Siegel.
Fotografía: Conrad W. Hall.
Música: Trevor Morris.
Montaje: John Refoua.
Diseño de producción: Derek R. Hill.
Diseño de vestuario: Doug Hall.
País: Estados Unidos.
Lugares de Rodaje: Louisiana (Estados Unidos).
Fechas de Rodaje: De 09-07-2.012 a 15-09-2.012.
Año: 2.013.
Duración: 119 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 16 años.
Género: Acción, Suspense.
Distribuidora: eOne Films Spain
Estreno: 10-05-2.013.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Calificación: 6,990.
Crítica:
11-05-2.013 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA
A tiro limpio
Recuperar la estética del cine de acción de los años 80, al estilo de la serie sobre el analista de la CIA Jack Ryan (Harrison Ford), parece ser la primera intención del director con "Objetivo: La Casa Blanca". Título español que altera el de la versión original: 'Olympus Has Fallen' (Olympus ha caído), que hace referencia a un código de los servicios secretos yanquis. La liberación del presidente de Estados Unidos -¡secuestrado por un grupo de terroristas norcoreanos!- es el detonante de la acción, donde los aspectos patrióticos priman sobre cualquier otra consideración. Sin embargo, no me parece que esta película de Antoine Fuqua esté inspirada por el amor a su patria.
Un comediante de segunda, Aaron Eckhart, es el encargado de dar vida al presidente de la nación más poderosa de la Tierra. Personaje representado en la gran pantalla por buen número de actores a lo largo y ancho de la historia del cine, entre los que resulta obligado incluir a Henry Fonda, Franchot Tone, Harrison Ford, Michael Douglas, Jack Nicholson, Anthony Hopkins y Daniel Day-Lewis, entre otros. Goloso mandatario metido esta vez en un complot de mucho cuidado, filmado con toda la parafernalia técnica y el despliegue de efectos especiales propios del caso.
No da más de sí este producto comercial, montado a partir de un guion con más agujeros que un colador, donde la acción pura y dura impone su ley de principio a fin de la función, que en esta ocasión roza lo absurdo, e incluso lo involuntariamente risible, sobre todo por culpa de unos diálogos muy poco trabajados, repletos de tópicos y lugares comunes. Asimismo, resulta curioso comprobar cómo reacciona Hollywood cuando el país se siente amenazado por un enemigo exterior, como es el caso. De ahí que la película de Fuqua se convierta en un hecho eminentemente popular, en el más conservador sentido del término.