El presente estudio de CELAG, ILGALAC y OTD Chile tiene por objeto presentar los posicionamientos y propuestas en materia de derechos LGBTI+ de les candidates a la Presidencia de Chile para las elecciones generales que se llevarán a cabo el 16 de noviembre de 2025.Comparte:0Compartidos
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14 NOVIEMBRE, 2025
1. Presentación del estudio
El presente estudio de CELAG, ILGALAC y OTD Chile tiene por objeto presentar los posicionamientos y propuestas en materia de derechos LGBTI+ de les candidates a la Presidencia de Chile para las elecciones generales que se llevarán a cabo el 16 de noviembre de 2025.
De acuerdo con el análisis realizado, la candidatura del Frente Unidad por Chile se presenta como la más comprometida con los derechos de la población LGBTI+, tanto por lo planteado en su plan de gobierno, como por sus compromisos y declaraciones públicas. Por su parte, los partidos de derecha que resaltan en las encuestas como el Partido Republicano de José Antonio Kast o el de Evelyn Mathei se destacan por su agenda conservadora. En medio de la campaña electoral, vale destacar el activismo desplegado por las organizaciones y colectivos LGBTI+ que han logrado derechos importantes y son un motor constante para garantizar que no existan retrocesos.
Situación política y principales problemas
En Chile, las elecciones presidenciales para el período 2026-2030 se realizarán el domingo 16 de noviembre. Esa fecha también se renovará la totalidad de las y los integrantes de la Cámara de Diputados (155 diputados) y se elegirán 23 de las y los 50 senadores de la república. En caso de que ninguno de los partidos alcance la mayoría absoluta de votos emitidos (el 50% + 1 de los votos) se realizará una segunda vuelta el domingo 14 de diciembre del presente año.
Para estas elecciones participan un total de 8 partidos con sus respectivos candidatos y candidatas electorales. Cinco de ellos provienen de partidos o coaliciones de partidos y tres se definen como candidatos independientes. Los candidatos de los partidos son Jeannette Jara, candidata de la coalición oficialista Unidad por Chile, José Antonio Kast del Partido Republicano, Evelyn Matthei de la Coalición Chile Vamos, Johannes Kaiser del Partido Nacional Libertario y Franco Parisi del Partido de la Gente. Entre los independientes se cuentan Eduardo Artes, Harold Mayne – Nicholls y Marco Enríquez Ominami.
Respecto a las principales preocupaciones de la ciudadanía de cara a las elecciones, según detalla la consultora “Tenemos que Hablar de Chile”, en todas las encuestas los temas relacionados con la seguridad ciudadana lideran la lista. El 65% de ciudadanos y ciudadanas menciona “el crimen” y “la violencia” y “la delincuencia” como principal preocupación y espera que el nuevo mandatario tome cartas en el asunto. La segunda preocupación que destaca es “la inmigración” (41% según IPSOS) seguida por “la corrupción” (40%) que ha subido mucho en relación con los años anteriores. La situación económica causa preocupación, pero no se encuentra entre las tres preocupaciones de los chilenos y chilenas, de forma que el desempleo se cuenta en cuarto lugar (35%) y la inflación en quinto (20%). En los temas sociales, la salud pública es lo que concita más atención sobre todo entre los sectores más vulnerados.
A pocos días de las elecciones, se impone también el rechazo ciudadano a la clase política. El Congreso es evaluada como la peor de las instituciones nacionales con un 90% de desaprobación. Además, los candidatos y candidatas tienen conciencia de que el triunfo lo brindarán al final electores moderados, no politizados y «obligados” (el voto es obligatorio). Por tal razón, los tres favoritos se han desmarcado de sus posiciones tradicionales. La candidata oficialista Jara subraya que su candidatura no es de su partido, sino de un pacto amplio. Matthei, candidata de la derecha tradicional, se ha declarado receptiva a ideas socialdemócratas. Por otra parte, Kast no se ha referido al programa valórico conservador que postuló en la elección de 2021, cuando derrotó a Boric en primera vuelta, más no en la segunda. Kast sostiene que lo que Chile precisa hoy es “un gobierno de emergencia que asuma con urgencia las tareas concretas para superar la crisis”.
2. Situación y derechos de la población LGBTI+ en el país
Según el Servicio Electoral de Chile (SERVEL) un total de 15.791.056 electores están habilitados y habilitadas para sufragar en el territorio nacional, además de 160.856 chilenos y chilenas en el exterior. En este marco, según el Informe «Orgullo LGBTI+ 2024» el 11% (más de un millón de personas) se reconoce parte de la comunidad LGBTI+, cifra que corresponde a personas de 18 años y más que se identifica como lesbiana, gay, bisexual, pansexual/omnisexual, asexual, trans binarias y no binarias.
Actualmente, Chile es un país considerado de bastante apertura con la población LGBTI+, pero no siempre fue así. Históricamente las personas de la diversidad sexual sufrieron exclusión y enfrentaron un marco legal discriminatorio, como lo expresa la “ley de estados antisociales” promulgada en 1954 por el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo que afectaba específicamente a “vagabundos, mendigos, locos y homosexuales”. La dictadura de Augusto Pinochet reforzó el conservadurismo de la sociedad manteniendo la penalización de la “sodomía” y reforzando estereotipos vejatorios. Es con la transición a la democracia en 1990 que el activismo chileno LGBTI+ logra mayor visibilidad y organización consiguiendo la atención a sus demandas. En 1999 consigue la despenalización de la “sodomía” siendo el penúltimo país de América Latina en hacerlo. Se produce también un avance significativo en la opinión pública chilena, expresada en un creciente y mayoritario apoyo al reconocimiento de los derechos de las personas LGBTI+ siendo uno de los países con mayor nivel de aceptación del continente1.
En materia de derechos reconocidos, un hito fundamental para la población LGBTI+ fue la publicación el año 2012 de la “Ley de no discriminación” conocida como “Ley Zamudio” pues se dio en respuesta al asesinato del joven Daniel Zamudio en un crimen de odio a la orientación sexual. Esta ley tiene por objetivo instaurar un mecanismo judicial que permita restablecer el imperio del derecho cuando se cometa un acto de discriminación arbitraria, incluyendo como categorías protegidas la orientación sexual y la identidad de género. En cumplimiento de esta norma, las Fuerzas Armadas de Chile derogaron todas las normas internas que impedían a homosexuales ingresar al Ejército, adecuando las prácticas y reglamentos de la institución a la legislación vigente, permitiendo desde entonces la incorporación de manera abierta de gays, lesbianas, bisexuales y trans.
En Chile también está reconocido el Acuerdo de Unión Civil (AUC), regulado por la ley 20830, promulgada el 13 de abril de 2015. Según la norma, el acuerdo puede ser celebrado por parejas de cualquier orientación sexual y confiere a sus contrayentes el estado de “conviviente civil”, generando derechos y obligaciones y regulando temas como el régimen patrimonial entre los convivientes civiles, su situación hereditaria, la protección previsional y de seguridad social, entre otros que anteriormente sólo eran considerados como efectos propios del matrimonio. El 9 de diciembre del 2021, el presidente Sebastián Piñera promulgó la Ley N° 21400 de Matrimonio Igualitario, reconociendo el matrimonio entre personas del mismo sexo, realizándose las ceremonias a partir del 10 de marzo de 2022. La Ley 21.400, también permite la adopción y filiación homoparental, pero en la práctica las normas hacían muy difícil su aplicación. Por esta razón, en junio del 2025, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó la Reforma Integral al Sistema de Adopción en Chile (boletín 9119), eliminando artículos homofóbicos, así como mejorando mecanismos y deberes para garantizar de manera efectiva el interés superior de niños, niñas y adolescentes (NNA).
Otra norma importante para la población LGBTI+ de Chile es la Ley de identidad de Género promulgada en 2018, la cual reconoce el derecho a la identidad de género autopercibida, permitiendo a mayores de 18 años el cambio de nombre y sexo en los documentos sin requisitos prohibitivos, pero atravesando un proceso judicial para personas trans entre 14 y 17 años. En octubre de 2022 el Registro Civil de Chile otorgó la primera cédula de identidad no binaria del país, la cual tiene una «X» en lugar de una «F» (de femenino) o una «M» (de masculino). Es importante anotar también que las denominadas terapias de conversión basadas en la orientación sexual o identidad de género y expresión de género, se encuentran prohibidas en el área de la salud por la Ley de Salud Mental (2021) y por la Circular B2 N.º 6 (2023) del Ministerio de Salud.
Pese a estos significativos avances en derechos para la población LGBTI+, todavía persisten problemas que impiden su plena inclusión y desarrollo. En tal sentido, el “Primer Estudio estatal sobre LGBTIQ+” publicado en abril del 2021 por la Subsecretaría de Prevención del Delito junto a colectivos LGBTI+ detalla cifras preocupantes. En efecto, el 89.3% de la población encuestada, declaró haber sufrido discriminación al menos una vez en su vida y el 64,4% experimentó lo mismo en el último año. Al considerar exclusivamente a las personas trans, las cifras son de 94,1% y 85,5% respectivamente. Esta discriminación se evidencia en insultos; seguido por gritos y hostigamientos (64,5%); imposiciones para cambiar de apariencia (48.7%) entre otras. Pese a estas altas cifras, sólo el 9,2% reportó o denunció los delitos de los cuales fue víctima, la mayoría no denunció porque le daba vergüenza; porque no sabía qué podía hacerlo o dónde y también porque pensaron que “la policía o los tribunales no hubieran hecho nada”.
El 2024, el XXII Informe Anual de DDHH de la Diversidad Sexual de Género, arrojó datos más preocupantes que constituyen retrocesos en términos de respeto a los derechos de la comunidad LGBTI+. Según el reporte, los casos de abusos hacia la comunidad LGBTI+ en solo un año aumentaron 78%, alcanzando un total de 2.847 casos el 2024, lo que representa un 23.5% de todos los atropellos registrados en los últimos 23 años. Es la primera vez desde el retorno a la democracia que se constata un retroceso en derechos previamente conquistados en los tres poderes del Estado. El Informe también reportó un incremento del 116,9% en discursos de odio, un 80% en campañas y movilizaciones homo/transfóbicas. La comunidad trans ha sido la más afectada, acumulando el 39.73% de los ataques reportando casos como asesinatos, agresiones en espacios policiales, abusos laborales y educacionales, campañas de odio y exclusión institucional.
En general, los importantes avances en derechos para la población LGBTI+, producto de la organización y lucha de la misma comunidad, lograron un país mucho más inclusivo y respetuoso. Sin embargo, Chile no es ajeno a la desigualdad, el aumento de discursos de odio y violencia y discriminación social e institucional, lo cual implica un desafío para el movimiento de la diversidad sexual y de géneros, así como también para el gobierno que asuma en el próximo período.
3. Marco legal electoral vigente
Respecto al marco electoral, en Chile se encuentra vigente la Ley 20.840 “Ley de cuotas y paridad” que establece un sistema transitorio de aplicación de cuotas para la inscripción de candidaturas femeninas a elecciones parlamentarias que define un techo máximo de representación, donde ningún género puede sobrepasar el 60% de participación en el total de registro de postulaciones al Congreso Nacional. La cuota fue establecida para las elecciones de 2017, 2021, 2025 y 2029, y ya dos elecciones se han realizado bajo esta condición. Asimismo, para estos cuatro procesos electorales, la norma contempla destinar un financiamiento especial a las candidaturas parlamentarias femeninas, que consiste en entregar un incentivo económico directo a los partidos políticos que tras la elección resulten con una candidata electa parlamentaria, y un reembolso adicional directo para las candidatas mujeres respecto del ejercicio de su gasto electoral.
Según esta ley, los partidos deben presentar listas a la Cámara de Senadores y Diputados con una composición de género más equilibrada. La Ley permite también la corrección de resultados, es decir en caso de que no se logre un equilibrio en los resultados, se reemplaza al candidato del sexo sobre representado menos votado por la candidata del sexo subrepresentado más votada de la misma lista. En las elecciones chilenas de 2025 nuevamente se aplicará la norma, de modo que ninguna lista de candidatos a diputados o senadores supere el 60% de un sexo, asegurando una representación de al menos el 40% del otro. En lo que lleva de aplicación, la ley de cuotas ha servido para aumentar la presencia femenina en el Congreso.
Respecto a acciones afirmativas para promover la participación y representación de la diversidad sexual, en Chile no existe una ley de cuotas LGBTI+ para las elecciones de 2025. En el año 2019 se presentó el proyecto de cuotas para diversidad sexual y de género en el órgano constituyente pero la propuesta de nueva Constitución fue rechazada y no se ha implementado una ley similar para el parlamento. Sin embargo, hay campañas informativas de distintas organizaciones que buscan que los candidatos respalden sus demandas y que los votantes puedan informarse sobre sus programas en temas LGBTI.
4. Presentación de candidatos y candidatas
Según datos oficiales del Servicio Electoral de Chile (SERVEL) en esta elección participan 8 candidaturas presidenciales, 125 a senadores y 1.096 a diputados. A continuación, detallamos los candidatos y candidatas a la presidencia en carrera.
- JEANNETTE ALEJANDRA JARA ROMÁN: 51 años. Administradora pública y abogada. Se desempeñó como funcionaria en el gobierno de Michelle Bachelet y ministra de trabajo del gobierno de Gabriel Boric. Pertenece al Partido Comunista Chileno y es candidata por el Frente Unidad por Chile.
- JOSÉ ANTONIO KAST RIST: 59 años. Abogado fundador del partido republicano. Fue candidato presidencial en las elecciones de 2017, 2021 y 2025. Ejerció como concejal de la comuna de Buin y como diputado de la República durante cuatro períodos consecutivos. Es candidato por el Partido Republicano en alianza con el Partido Social Cristiano.
- EVELYN ROSE MATTHEI FORNET: 71 años. Licenciada en economía. Fue alcaldesa de la comuna de Providencia entre 2016 y 2024. Se desempeñó como funcionaria en el gobierno de Sebastián Piñera. Pertenece al partido Unidad Democrática Independiente (UDI) y candidata por la coalición Chile Vamos.
- JOHANNES MAXIMILIAM KAISER BARENTS VON HOHENHAGEN: 49 años. Político chileno, YouTuber y fundador del Partido Nacional Libertario y ex militante del partido republicano. Es diputado por el período 2022-2025 y candidato por el Partido Nacional Libertario.
- FRANCO ALDO PARISI FERNANDEZ: 58 años. Economista e ingeniero comercial. Fundador del Partido de la Gente y candidato presidencial por este espacio el 2013, 2021 y nuevamente en el 2025.
- EDUARDO ANTONIO ARTÉS BRICHETTI: 74 años. Profesor de educación general básica y dirigente social. Fue candidato a la presidencia el 2017 y el 2021 por el partido Unión Patriótica. Las elecciones 2025 postula como candidato independiente.
- MARCO ANTONIO ENRÍQUEZ- OMINAMI GUMUCIO: 52 años. Cineasta y licenciado en filosofía. Fue miembro del Partido Socialista (PS) y diputado de la República entre 2006 y 2010. Fue tres veces candidato a la presidencia y este año 2025 participa como independiente.
- HAROLD MAYNE – NICHOLLS SECUL: 64 años. Periodista y dirigente deportivo. Se desempeñó como presidente de la Federación de Fútbol de Chile. Se postula como candidato presidencial independiente.
Según la encuesta CADEM del sábado 25 de octubre, el 30% de la población afirma que votaría por Jeannette Jara, el 22% por José Antonio Kast, el 15% por Kaiser, el 14% por Evelyn Mathei y el 5% por el candidato Franco Parisi. Más atrás se cuentan las preferencias por los candidatos independientes con 1% de intención de voto para Mayne-Nicholls, Artés y Enríquez-Ominami. Respecto a un escenario de segunda vuelta, todas las encuestas coinciden en afirmar que Jara perdería con Kast por 12% (36% vs 48%), con Matthei por 13% (33% vs 46%), con Kaiser por 5% (36% vs 41%) y con Parisi por 3% (34% vs 37%). Vencería, en cambio, a Enríquez Ominami por 19% (36% vs 17%).
Tal como se desarrollará, de las cuatro candidaturas con mayores opciones de pasar a la segunda vuelta, es la de Jeannette Jara la que ha resaltado aspectos vinculados a garantizar los derechos de las personas LGBTI+. Aunque sin opciones de ganar, la candidatura de Marco Enríquez Ominami también plantea apoyo a la diversidad sexual.
5. Principales propuestas y posicionamiento por candidato/agrupación política
A continuación, resumimos los planteamientos sobre los derechos de la población LGBTI+ presente en los tres principales partidos. Se ha considerado una priorización de acuerdo principalmente con la intención de voto. Se han tomado en cuenta tanto sus planes de gobierno como declaraciones públicas de candidatos y voceros a favor de los derechos LGBTI+, así como su participación en actividades públicas en similar sentido.
JEANNETTE JARA ROMÁN. Frente Unidad por Chile
La candidata por el Frente Unidad por Chile, ha publicado en la web oficial del SERVEL su programa de gobierno “Un Chile que cumple”, documento que sintetiza su visión de país y principales propuestas. De modo general, el programa resalta el “compromiso con los derechos humanos y de la dignidad de las personas, los derechos de las mujeres, perspectiva de género, la inclusión social, la eficiencia estatal y la modernización del Estado”. Si bien no se explicitan medidas específicas, con este encabezado es el plan que más directamente reafirma el compromiso con los asuntos de género y la inclusión entre los cuatro candidatos. El plan un “Chile que Une” desarrolla propuestas sobre cuatro grandes pilares: 1) Bases económicas para un crecimiento justo, inclusivo y sostenible, 2) Seguridad, justicia y defensa, 3) Un Estado Social que cumple a las personas y 4) Convivencia democrática, detallando condiciones para que nadie se sienta excluido.
Justamente, el eje 3 “Un Estado social que cumple a las personas”, incluye los temas de salud con medidas orientadas a “garantizar el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, que implican tanto el acceso a servicios médicos, como el derecho a decidir sobre el propio cuerpo, a vivir la sexualidad libre de violencia, coerción y discriminación”. Más específicamente en el punto 11 dedicado a los derechos sexuales y reproductivos, el Plan resalta la decisión de impulsar una salud integral y accesible para todas las personas, garantizando la prevención de ITS con perspectiva de género, el acceso universal a métodos de prevención, y fortaleciendo prestaciones que incluyan a la población trans a partir de la actual Política Nacional de Salud Trans.
También en el acápite sobre salud mental, resalta la Medida 221 “Mejora y reforzamiento de los programas de acompañamiento a jóvenes trans y sus familias (PAIG)” para que la identidad de estas personas no sea motivo de ruptura familiar y para otorgarle legitimidad pública a este servicio social. Dicho reforzamiento consistirá en (i) un sistema centralizado de monitoreo de los programas (con protección a la privacidad de los usuarios); (ii) elaboración (o si ya se publicaron, difusión activa) de recomendaciones técnicas sobre hormonoterapia en jóvenes trans y; (iii) capacitación a profesionales de la salud sobre niñez y juventud trans.
Por otro lado, el punto referido a Educación, plantea de modo genérico, medidas relacionadas a los derechos y la inclusión de personas de la diversidad sexual. Específicamente la medida 271 expone la importancia de establecer una política de Educación sexual integral y afectiva acorde a las edades, para que niñas, niños y adolescentes reciban información científica y veraz sobre sexualidad, promoviendo el desarrollo integral, el autocuidado y la prevención de riesgos como abusos y violencia sexual, embarazos no planeados e infecciones de transmisión sexual.
Finalmente, el eje 4 “Convivencia democrática” desarrolla la medida 365 orientada a reimpulsar la discusión de la ley antidiscriminación promoviendo la aprobación de la reforma a esta ley, actualmente en trámite. Con la aprobación de la nueva ley se espera especialmente crear una institucionalidad sobre diversidad sexual y de géneros que proteja a la comunidad LGBTI+.
Es importante resaltar que el programa de gobierno del Frente Unidad por Chile, liderado por Jeanette Jara, es bastante genérico en lo que respecta a medidas y líneas de acción explícitamente orientadas a la población LGBTI+. A diferencia de lo que ocurre con otros grupos vulnerados como las personas con discapacidad, adultos mayores, migración e incluso el tema de cuidado animal, no hay un punto específico para la problemática de la diversidad sexual. Lo poco que se desarrolla a detalle refiere a la juventud trans y se centra en temas de salud, educación y lucha contra la violencia.
Sin embargo, pese a estas menciones escuetas, Jara es la candidata que más se ha pronunciado contra la discriminación por orientación sexual, dando declaraciones y participando en actividades vinculadas a la comunidad.
Entre las propuestas que se presentaron destaca la demanda por la implementación de leyes y políticas públicas contra los discursos de odio, la creación de una institucionalidad estatal y autónoma contra la discriminación, una Ley de Educación Sexual Integral, la plena igualdad para las personas trans, sea cual sea su edad, el reconocimiento legal del género no binario, la reforma de la Ley Zamudio y garantías de ningún retroceso a los derechos ya conquistados. Vale mencionar que Jara firmó el compromiso que incluía ejes importantes como la Reforma a la Reforma a la Ley Antidiscriminación, la Ley de Convivencia Escolar, la Ley de Educación Sexual Integral (ESI), la Reforma a la Ley de Adopción y la Ley de Eutanasia.
En esa línea, Jara es una de las abanderadas y más comprometidas con la problemática y las soluciones de la población sexualmente diversa.
JOSÉ ANTONIO KAST RIST. Partido Republicano
El candidato mejor posicionado de la derecha chilena ha presentado el Plan de Gobierno “La Fuerza del Cambio” que contiene sus principales propuestas para el país. Se trata de un programa sumamente conservador que parte de identificar tres grandes emergencias que enfrentaría la sociedad chilena, proponiendo acciones para superarlas. En primer lugar, identifica una emergencia en seguridad, con énfasis en “los extranjeros que violan impunemente las fronteras”, en segundo lugar, menciona una emergencia económica y finalmente habla de una emergencia social, expresada en la pobreza, la “deficiente atención en salud o educación”. Asimismo, afirma que estas tres emergencias tienen como factor común la crisis del estado que se habría transformado en un gran obstáculo atrapado por la burocracia, la obsesión regulatoria y el gasto público desbordado.
Como el mismo documento menciona, el programa de Kast mantiene una visión conversadora orientada a resaltar la familia heteronormativa como base de la reproducción social, cuestionando por ejemplo la caída en la tasa de fecundidad nacional. Justamente, las medidas de emergencia social planteadas exponen acciones para “recuperar la libertad, la justicia y la dignidad” con propuestas para garantizar el acceso oportuno a la salud o recuperar el “sueño de la casa propia”. Un punto fundamental es el que propone recuperar el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos y la libertad de elegir escuelas, reafirmando la libertad de los padres para “transmitir valores y principios”. Para el candidato, las salas de clases se han vuelto un reemplazo de la familia, contraviniendo muchas veces las creencias y principios de los padres.
En ninguna parte del documento se hace alusión siquiera al enfoque de género, la diversidad sexual y mucho menos se plantean medidas contra la discriminación y a favor de la inclusión. No se menciona absolutamente nada sobre salud sexual y reproductiva, tampoco sobre educación sexual integral y menos en lucha contra la violencia de género y la discriminación. Es un programa abiertamente conservador, que bajo el rótulo de “pro-familia” avala una restricción en derechos conquistados para las personas LGBTI.
Sin embargo, a diferencia de la candidatura presidencial de 2021, donde el candidato Kast atacó abiertamente los temas de diversidad sexual, en esta campaña 2025 el republicano esquiva los temas sobre libertades individuales y pone a mujeres en cargos de alta responsabilidad en su equipo. No olvidemos que el 2021 Kast ganó la primera vuelta con un programa en el que se comprometía a eliminar el ministerio de la Mujer, derogar la ley de aborto en tres causales y rechazaba expresamente la aprobación del matrimonio homosexual y la posibilidad de que parejas del mismo sexo pudieran adoptar. Para esta campaña presidencial, la estrategia de Kast prefiere esquivar los denominados temas valóricos y colocar a mujeres en cargos de responsabilidad de su partido.
Como parte de esta estrategia menos confrontacional con la agenda LGBTI+, en el debate presidencial, el candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, enfatizó en que «nunca ha discriminado a nadie» por su orientación sexual. Asimismo, agregó que existe «lobby gay» y explicó que «no tengo problema con el mundo homosexual, porque respeto la dignidad de las personas, cosa distinta es cuando se hace un lobby permanente para tratar de influir en las personas (…) que van se instalan y presionan a los parlamentarios».
EVELYN ROSE MATTHEI FORNET. Chile Vamos
La candidata Matthei presentó el documento “Bases programáticas para Chile” que reúne cinco grandes ejes: I) Combate al crimen organizado, II) Crecimiento económico, III) Una mejor calidad de vida, IV) Poner orden, y finalmente V) Chile en el mundo: autonomía estratégica y cooperación global. Lo mismo que las otras candidaturas de derecha, comparte una visión que remarca la necesidad de “orden en la vida del país”, enfatizando en las amenazas del crimen organizado, la violencia y los migrantes. En tal sentido, coloca énfasis en recuperar el principio de autoridad del Estado como la única instancia que posee el monopolio legítimo de la fuerza es fundamental para “detener la violencia que se expande silenciosamente por todos los rincones del país”.
A diferencia de los candidatos de derecha Kast o Kayser, Mathei si desarrolla un eje específico relacionado a la mujer y a la equidad de género. Justamente, el eje III, una mejor calidad de vida para todos, incluye el sub punto “Mujeres libres, seguras y con más oportunidades”, el cual parte de reconocer los avances de Chile en materia de equidad de género, pero reconociendo también que persisten barreras e injusticias que impiden que las mujeres, especialmente las más vulnerables, puedan desplegar plenamente sus talentos y proyectos de vida. En esa línea propone medidas específicas que garanticen una mejor calidad de vida para las mujeres que a su vez preserven la familia tradicional, es el caso de una mayor flexibilidad y oportunidades al empleo femenino, proponiendo jornadas laborales compatibles con la maternidad.
El programa de Mathei, tampoco expone explícitamente medidas para garantizar los derechos de la población LGBTI+. Si bien hace referencia a la necesidad de trabajar en un mayor desarrollo de personas con discapacidad, mujeres, pueblos originarios e incluso por “el cuidado de nuestras mascotas” se evita en todo momento hacer referencia a los derechos de la diversidad sexual. La permanente mención a los valores de la familia tradicional refuerza esta visión conservadora característica de la candidata.
No obstante, debe reconocerse que Mathei ha variado algunas de sus posiciones en el tiempo: en una entrevista recogida por el diario La tercera, reconoció que su opinión sobre el matrimonio igualitario y la adopción homoparental habían cambiado, pues hace diez años ella declaró no estar de acuerdo. Frente a esta temática, señaló que “en esa época no estaba de acuerdo, ahora sí estoy de acuerdo… creo que ha cambiado la sociedad y ha cambiado el mundo”. También reconoció que en su pasado de parlamentaria votó a favor del divorcio, de la píldora anticonceptiva del día después y del aborto en tres causales.
Conclusiones
De lo expuesto se puede en primer lugar, destacar la posición de la candidata Jeannette Jara del Frente Unidad por Chile, por ser la que demuestra mayor compromiso con los derechos de las personas LGBTI+. Ello se evidencia también en la posibilidad de continuidad y profundización de lo actuado por el actual presidente Gabriel Boric, y otros que reivindican como el de Bachelet que logró avances normativos y de inclusión sustantivos. En un contexto de arremetida conservadora, la posición de Jara, comprometida con la agenda de la diversidad es importante de resaltar y acompañar.
También debe hacerse una mención especial a otres candidates como Eduardo Antonio Artés Brichetti y Marco Antonio Enríquez- Ominami Gumucio, quienes durante su campaña se han visibilizado con activistas LGBTI+ y han manifestado su apoyo a la agenda de la diversidad sexual.
Por su parte los partidos conservadores, especialmente el Partido Republicano, ha optado por establecer una clara posición homotransfóbica y anti LGBTI+, que levantó campañas anteriores. Por mero cálculo político y el temor de no conquistar electores jóvenes comprometidos con estas demandas, Kast hoy se presenta como más respetuoso y tolerante, aunque sin llegar nunca a defender los derechos de la diversidad sexual. En similar sentido, Mathei pretende ubicarse como una derecha más actual y acorde a los tiempos que si reconoce la equidad de género pero que todavía acepta con distancia el matrimonio y la adopción entre parejas del mismo sexo. También ignora la problemática de exclusión, discriminación y violencia que afrontan grupos específicos como el de las personas trans.
En general, la temática LGBTI+ no ha sido discutida de manera explícita por los principales partidos durante esta campaña. Es por ello por lo que las organizaciones y colectivos resaltan la importancia de que las personas LGBTI+ participen de las elecciones presidenciales y parlamentarias, comprometiendo a los candidatos y candidatas con las demandas de las diversidades sexuales y de género e informen sobre las propuestas de los aspirantes a cargos públicos.
Fuentes
Planes de gobierno
Candidaturas y programas Elecciones Presidencial y Parlamentarias 2025
Encuestas
https://www.tenemosquehablardechile.cl/noticias/seguridad-inmigracion-corrupcion-principales-preocupaciones-ciudadania-chile-2025Reportes
https://database.ilga.org/chile-lgbti-es
