Phil Rudd, batería de AC/DC de 1975 a 1983 y de 1994 a 2014, ha sido condenado en un juzgado de Nueva Zelanda a ocho meses de arresto domiciliario tras ser declarado culpable de un delito de amenazas de muerte y posesión de marihuana y metanfetaminas.
Rudd estará monitorizado durante 24 horas al día en su casa de Tauranga (Nueva Zelanda) y será enviado a prisión en caso de que viole los términos de la sentencia. "Comprendo", respondió repetidamente el músico, que hacía frente a una pena máxima de siete años de cárcel.
"Queen reemplazó a Freddie Mercury. AC/DC siguen adelante sin ti. Tu lugar en la banda ahora no existe y no existirá hasta que no soluciones tus asuntos de adicciones", ha dicho a Rudd el juez Thomas Ingram, quien además ha añadido, según diarios locales, que el batería necesita ayuda con sus problemas de drogas.
El abogado de Rudd, Craig Truck, ha confirmado a Rolling Stone que ya han presentando un recurso por considerar la sentencia, que incluye también completar un programa de rehabilitación, "manifiestamente excesiva".
Los problemas de Phil Rudd con la ley terminaron provocando su salida del grupo, a pesar de que sí grabó la batería en el reciente disco 'Rock or Bust'. En la gira ahora ocupa su lugar Chris Slade.
Este caso comenzó el pasado mes de noviembre, cuando Rudd fue arrestado por intento de asesinato, amenazas de muerte y posesión de drogas. Un día después se retiraron los cargos de intento de asesinato, pero el proceso prosiguió con los otros supuestos.