La Policía española ocupó 121 kilos de cocaína escondidos en un contenedor cisterna, que viajó desde República Dominicana al puerto de Valencia, desde donde fue trasladado en tren a Madrid y, desde allí, en camión hasta Sabadell (Vallès Occidental).
Las autoridades, además, arrestaron a ocho personas vinculadas al caso.
El tanque fue enviado inicialmente a Sudamérica lleno de champú, y regresó a Valencia supuestamente vacío, aunque en su interior se encontraban adosados los 121 kilos de droga, gracias a una sofisticada estructura metálica, según ha informado la Policía Nacional.
Entre los ocho detenidos se encuentra el presunto líder de la organización, un empresario vinculado a clubes de alterne y discotecas del ambiente nocturno madrileño. Según ha explicado la Policía, este grupo enviaba la cocaína a Madrid desde Santo Domingo (República Dominicana) hacia Madrid.
El líder de la organización compaginaba la dirección de estos traslados de droga con los preparativos de populares eventos de música electrónica.
Fue él mismo quien diseñó un novedoso sistema para que la cocaína resultara indetectable, fabricando una estructura metálica que sería adosada al interior del contenedor cisterna.