– ¿Te puedes creer que haya colgado eso es Facebook?
- No contratada.
Cuidado con lo que compartes en tus redes sociales: son una de las principales fuentes de búsqueda de candidatos para los profesionales de los recursos humanos (RRHH). Y no nos referimos solo a redes profesionales como LinkedIn, sino sobre todo a redes de perfil general como Facebook, Twitter o Tuenti.
Cada vez más las empresas de selección tienen en cuenta la información que los candidatos ofrecen de manera pública en las diferentes redes sociales. Esta práctica es habitual que refleja cómo es el candidato en sus momentos de ocio, fuera de su ámbito laboral. El problema viene cuando descuidamos nuestra marca personal, especialmente los usuarios más jóvenes, y compartimos información o fotografías que puedan perjudicar nuestra imagen de cara a un posible empleador.
Además de tener en cuenta qué contenidos comparte un candidato, los responsables de RRHH también se fijan en qué manejo tienen de las redes sociales y del entorno online, capacidades que hoy en día son indispensables en un gran número de puestos de trabajo. Según un estudio de la compañía de trabajo temporal Adecco, en 2012 el 80% de los reclutadores consultaban las redes sociales de los candidatos y, en muchas ocasiones, esta consulta se resolvía en el descarte de la persona del proceso de selección.
El hecho de tener muchos o pocos fans o seguidores no es, a priori, una cuestión que los seleccionadores tengan en cuenta sino que se fijan más en el uso, responsable o no, que el candidato hace de la red, sus comentarios, su actividad, temas de interés, interacción…
No buscas, te encuentran
Pero no todo son inconvenientes. El uso de las redes sociales en la búsqueda de candidatos también ha llevado a otra práctica habitual entre los responsables de RRHH: reclutar a candidatos pasivos. Es decir, cada vez es más común que una empresa muestre su interés por un profesional al que ha accedido gracias a las redes sociales, especialmente LinkedIn, y que ni siquiera estaba en búsqueda activa de trabajo pero sí que está en un escaparate de fácil acceso para los reclutadores.
Por estos motivos, es esencial trabajar nuestra imagen o marca personal que transmitimos a través de las redes sociales, porque, nunca se sabe: nos pueden dar trabajo o quitárnoslo.