Las personas orientales intentan buscar rasgos occidentales. Para ello, existen procedimientos estéticos que lo consiguen como el occidentalizarse los ojos, es decir, intentar tener ojos occidentales. El Dr. Tai-sik Yoon del Centro Clínico Mir-Mir de Barcelona, explica este procedimiento.
Desde hace algunos años, el modelo de belleza que han adoptado los jóvenes asiáticos ha sido el occidental. Intentan tener una nariz más proyectada, una cara más ovalada y sobretodo unos ojos más grandes, más abiertos, en definitiva “ojos más occidentales”.
Esta es, sin duda alguna, la intervención quirúrgica estética más demandada en la actualidad entre la población asiática.
Occidentalizarse los ojos significa ni más ni menos que recrear el doble pliegue del párpado superior, característico de los ojos occidentales. El párpado oriental se caracteriza por ser liso y carecer de pliegue. Menos del 50% de los asiáticos tienen un doble pliegue de manera natural. La presencia de dicho pliegue proporciona la sensación de tener unos ojos más grandes y atractivos.
La cirugía no pretende borrar las huellas raciales y rasgos característicos de la raza asiática, sino introducir un nuevo elemento para mejorar su aspecto final. Este nuevo elemento debe ser armónico al resto de la cara. Un doble pliegue alto puede ser muy atractivo para unos ojos occidentales pero no lo será tanto para unos ojos orientales, ya que no será armónico con el resto de los rasgos faciales.
Sin embargo, un doble pliegue bajo en unos ojos orientales conseguirá plenamente el objetivo que perseguimos de mejorar el aspecto y conseguir unos ojos más bellos, a la vez que conservamos sus rasgos esenciales.
¿Cómo se consiguen los ojos occidentales?
La intervención para conseguir acercarse a esos ojos occidentales es sencilla, realizándose bajo anestesia local en régimen ambulatorio. El tiempo de baja es mínimo, pudiendo el/la paciente incorporarse a la vida normal casi inmediatamente.
Existen dos opciones quirúrgicas:
- La técnica abierta consiste en recrear el doble pliegue a través de una incisión en el párpado superior que finalmente resulta imperceptible.
- La técnica cerrada recrea el doble pliegue mediante unos puntos de sutura sin necesidad de incisión alguna.
Cada una de las opciones tiene sus ventajas e inconvenientes. La elección final de una técnica u otra dependerá de las características de cada párpado y de las preferencias de cada cirujano.