Según un informe elaborado por ambas organizaciones sobre las medidas fiscales para la movilidad eléctrica en España, el país necesita 5 millones de vehículos eléctricos para cumplir con los objetivos climáticos y sólo logrará alcanzarlo si adapta los impuestos a la automoción al principio de ‘quien contamina paga’.
En cuanto al impuesto de matriculación, el documento señala que en la actualidad, aproximadamente 6 de cada 10 coches vendidos en España están exentos del impuesto de matriculación a pesar de emitir hasta 120 gramos de CO₂ por km, debido a una metodología desactualizada.
El informe destaca que España tiene que rediseñar el impuesto de matriculación para orientar a los consumidores hacia la compra de vehículos de cero emisiones
Miriam Zaitegui, de Ecodes, destacó que los impuestos son una medida "primordial" para impulsar la movilidad sin emisiones y aseguró no entender cómo un coche "que quema gas" recibe las mismas bonificaciones que el coche eléctrico que no emite
"El coche eléctrico es el futuro y la automoción en España puede ganar también con la transición ecológica. La reforma de los impuestos a la automoción representaría el pistoletazo de salida para el coche eléctrico en España.” , explicó el jefe de Movilidad Eléctrica de T&E, Saúl López.
Los gobiernos de toda Europa deberían seguir el ejemplo de los Países Bajos y del Reino Unido y reformar la fiscalidad de los coches de empresa para dirigir el mercado de forma más contundente hacia los turismos de cero emisiones, el carsharing eléctrico, y la electrificación del transporte ligero de mercancías dentro de las ciudades.
vehículo eléctrico punto de carga
Impulsar la instalación de una red de puntos de carga nacional
Es necesario elaborar un Plan Nacional de puntos de recarga rápida y ultrarrápida (más de 100 kW) para la red de vías de calzadas separadas, simplificando el proceso administrativo para su instalación y puesta en marcha; impulsar la instalación de puntos de carga en empresas, acompañando dicha medida de incentivos para su instalación y uso, y crear hubs de carga en núcleo urbano, enfocados principalmente a los servicios de transporte de pasajeros, reparto urbano de mercancías, entrega de última milla, carsharing, etc, siempre cero emisionesAsimismo, el informe destaca que es importante impulsar la instalación de una red de puntos de carga nacional, tanto en carreteras como en empresas y en núcleo urbano, para así terminar con la ansiedad de quedarse sin autonomía de los potenciales compradores de coches eléctricos.
Otra medida estrella para hacer despegar el mercado de los eléctricos, y así bajar los costes de producción en masa, es el apoyo fiscal al vehículo eléctrico en las empresas. Por un lado, favorece la creación de un mercado de vehículos eléctricos seminuevos (de 3-5 años y mantenimiento profesional) ya que, generalmente, las empresas adquieren estos vehículos a través de sistemas de leasing y/o renting.
Por otro lado, conlleva la instalación de puntos de recarga en el lugar de trabajo, lo que permite incorporar a compradores que no disponen de garaje privado y que, de otro modo, podrían no decidirse a comprar un vehículo eléctrico.
Por último, la reforma del etiquetado ambiental de los vehículos (0, ECO, C, B) es importante para empoderar a los consumidores a tomar la decisión de compra correcta. Hoy en día el etiquetado permite la inclusión, dentro de las categorías 0 y ECO, de vehículos a gas y de SUV híbridos enchufables de gran cilindrada que tienen emisiones contaminantes elevadas, en muchos casos superiores a las de vehículos de menos tamaño que con los actuales criterios reciben etiquetas C o B.