Revista En Masculino
Este fin de semana, en nuestra parcela han aparecido estas criaturicas, son las crías de la "Peque" una de las gatas que nació el año pasado y que este verano nos ha traído esto. A los que hay que sumar los tres o cuatro más que ya nos trajo el mes pasado una de sus hermanas.
La cosa es que al llegar cangreyayo se puso a regar, y se ve que les cayó agua y empezaron a chillar, por eso los vimos. Los sacamos de su guarida, debajo de unos geranios y cangreyayo los secó. Lo mejor es que la madre estaba allí mirándonos y no protestó en ningún momento, de hecho, nos dejo tocarlos y cogerlos, cosa que no hemos podido hacer con los de la otra gata. Después de acomodarlos un poco los volvimos a dejar en su sitio.
Cada uno nos pusimos a lo nuestro, yo estuve partiendo almendras hasta que me arrebató el sitio cangrejito.
Pero por la tarde, después de comer, la siesta y la merienda, mamacangreja escuchó unos chilliditos, como los de los gatitos que encontramos por la mañana, pero en otra parte del huerto. Los fuimos buscando hasta que los encontramos. Por lo visto la "Peque" no había tenido tiempo de llevarlos a todos y tenía otros dos esperando en otro escondite.
Decidimos facilitarle el trabajo, ya que está bastante flaca, y se los llevamos con los demás, a su gatera de los geranios. Esperemos que salgan los cinco adelante, pero por otro lado, la parcela se está convirtiendo en un santuario felino, digno de las mejores casas de viudas asociales que se rodean de decenas de gatos, nosotros de momento tenemos cerca de 15 gatos en estos momentos, y a menos no creo que vaya.
Lo mejor de todo es la experiencia para cangrejito que pudo tocarlos y cogerlos tan pequeñitos, creo que son vivencias que aportan mucho a los niños.
Por cierto, si alguien quiere algún gatico que lo diga que tenemos de todos los colores, blancos, negros, marrones, atigrados...