Dr. Plinio Gómez Velásquez
HOLA LUIS!
QUE TU SALUD SEA LA MEJOR Y LOS AVANCES EN LA ESPECIALIDAD TAMBIEN.
CONFORME A TU MENSAJE ULTIMO, DEBO DECIRTE QUE LOS CASOS MAS INTERESANTES PUBLICADOS HAN SIDO, PARA MI, LOS SUCEDIDOS A PACIENTES CON QUIENES SE SOBREPASARON CON SEDANTES E HIPNOTICOS, SOBRE LA ANESTESIA DE BASE QUE RECIBIAN, Y QUE HICIERON ESPASMO DE GLOTIS CON PARO RESPIRATORIO Y PARO CARDIACO.
DENTRO DE LAS MUCHAS EXPERIENCIAS QUE HE TENIDO, RECUERDO UN PARO CARDIACO EN NOCHE BUENA. EL PACIENTE ESTABA BAJO ANESTESIA GENERAL, CON INTUBACION ENDOTRAQUEAL, PARA UNA RECONSTRUCCION POST TRAUMATICA DE URETRA POR ACCIDENTE DE TRANSITO. ERA UN ANCIANO POLITRAUMATIZADO. DE INMEDIATO RECURRI A TORACOTOMIA CON MASAJE CARDIACO DIRECTO, QUE COMBINADO CON LA OXIGENACION, PERMITIO RESOLVER EL PARO, CONCLUYENDO EXITOSAMENTE LA INTERVENCION. CON EL ANESTESIOLOGO NOS ABRAZAMOS FUERTEMENTE POR EL EXITO Y PORQUE EL HECHO OCURRIO UN 24 DE DICIEMBRE, MIENTRAS LAS MADRES DE LA COMUNIDAD PASARON CERCA DEL QUIROFANO, CANTANDO NOCHE DE PAZ.
OTRO CASO, ESTA VEZ NEGATIVO, FUE DE UN NIÑO CON LABIO LEPORINO, QUE EL ANESTESISTA NO QUISO INTUBARLO, Y LE DIO GENERAL ENDOVENOSA. A MITAD DE LA OPERACION EL COLEGA DESAPARECIO DEL QUIROFANO Y NO HABIA QUIEN CONTROLE AL NIÑO, POR MAS QUE LO LLAMABAMOS. CUANDO TUVIMOS SANGRADO OSCURO SE PRODUJO UN PARO CARDIORRESPIRATORIO, QUE FUE IMPOSIBLE DE REANIMAR. POR SUPUESTO QUE HUBO RECRIMINACION Y NUNCA MAS LO OCUPE NI LE HABLE.
BUENO, SON DOS RECUERDOS MEMORABLES Y QUE TAL VEZ SEAN INTERESANTES PARA TI.
APROVECHO, UNA VEZ MAS, DE FELICITARTE POR EL BLOG Y POR TRABAJAR PARA LA AUTENTICA REEVINDICACION DEL ANESTESIOLOGO EN EL PAIS, PORQUE DE VERDAD SE MERECEN UN MEJOR TRATO EN HONORARIOS Y UN GRAN RESPETO GREMIAL. PORQUE SIN USTEDES NO HABRIAMOS CIRUJANOS.
UN ABRAZO.
Plinio
El Dr. Plinio Gómez Velásquez es un prestigioso Cirujano General y Plástico arequipeño. Ex Jefe del Departamento de Cirugía del Hospital Obrero y Profesor de la Facultad de Medicina de la UNSA, en la ciudad de Arequipa.
Excelente y dedicado maestro. Cómo olvidar su gentil invitación al grupo de alumnos de la cátedra de cirugía a su clínica particular, donde, de manera extra-curricular y muy desinteresada, nos enseñaba a suturar heridas de "piel" utilizando, como "maqueta", orejas de cerdo. Nuestro eterno reconocimiento, maestro.