Ben lleva todo el año entrenando para la competición más importante de su vida.
Ben es un cortometraje mordaz. Es como una caricia y luego una caída a un abismo sin fondo.
En ' Ben', Alex Galeote nos ofrece una actuación estelar que nos deja sin aliento. Sin apenas palabras, el actor nos sumerge en un mundo emocional a través de sus silencios y miradas. Me perturbó mucho su papel y me conmovió a partes iguales. Me quedé sin saber qué decir al comprender el verdadero propósito de su entrenamiento.
Miki Durán con esta producción que es una feroz critica a una realidad, me ha conmovido profundamente y me ha llenado la cabeza de preguntas.
El director es muy valiente al sacar a la luz un hecho que ocurre en verano. Es como si una fuerza invisible los atrajera a este comportamiento tan loco y extraño, como una polilla a la llama.
El cortometraje se centra en Ben y en parte de su entorno. Creo que la familia del protagonista y el entrenador influyen en él, pero hay una clara falta de comunicación por parte de los adultos con sus hijos. Tendría una conversación con mi hijo para que entienda sobre los riesgos que conllevan ciertas decisiones y las consecuencias no solo para ellos mismos, para la familia.
Me he quedado sin aliento en algunos momentos, sobre todo en los minutos finales. Creo que esperaba un milagro o alguna señal que le hiciese cambiar de idea.
La historia te atrapa con su estilo documental y los testimonios que tenemos tan reales que te hacen caer en la trampa como una mosca. Sin embargo, los giros inesperados te dejarán sin palabras y te harán cuestionarte sobre la delgada línea de la realidad y la ficción.
Creo que la sociedad se encuentra en un estado muy crítico. La sobreexposición constante a través de redes sociales y medios digitales ha generado que el mundo gire muy rápido y que todo sé muy superficial, lo que está afectando mucho a las decisiones, relaciones y a la salud mental.
Ya que de una forma sutil, pero dura, aquí se habla de la mente y que Ben tiene que estar fuerte psicológicamente.
Aunque, me puse a pensar en que si el protagonista se detiene puede pensar en todo lo que implica lo que hace y puede ser que se eche atrás.
El cortometraje, una vez más, demuestra el poder que tiene para crear conciencia, crear debates, buscar soluciones y provocar cambios.