Por casualidades de la vida, Victoria tendrá que cenar con un famoso cantante que jamás le ha gustado. Odia lo prepotente y egocéntrico que se muestra y lo que de verdad le gustaría sería que se fuera con la música a otra parte.
Leo es un cantante de éxito que lo último que espera encontrarse, en la cena que le han preparado, es a alguien como Victoria. Por ello moverá todos los hilos que hagan falta para que sea su acompañante en la gira que está a punto de comenzar.
Pero esta no es solo su historia. También es la de Aitana y Darío, el hermano mayor de Victoria, que no sabrá lo que tiene hasta que sea demasiado tarde. O tal vez no...
Una novela que nos habla de la familia; de cinco hermanos y de cómo los sentimientos pueden cambiar sin apenas darnos cuenta.
Con la música a otra parte de Tamara Marín es la primera novela que leo de esta escritora y me ha sorprendido gratamente.
La historia se lee sola y de una sentada. Los capítulos son cortos y están narrados de tal forma que enganchan totalmente. Son varios narradores/narradoras las que nos dejan meternos en sus cabezas, en sus sentimientos y es algo que me agradó. Pensaba que solamente los protagonistas Leo y Victoria serían los encargados de contarnos todo, pero me equivoqué.
Es una novela coral, pero bastante distinta al resto que he leído. Son muchos personajes y pueden aparentar ser secundarios de lujo, aunque nada más lejos de la realidad.
Algunos de estos personajes serán esenciales en la resolución de algunos conflictos o serán primordiales para que entendamos algún comportamiento que otro.
Tamara Marín nos presenta a una familia para nada atípica, pero con los que te encariñas desde el inicio y que son como un huevo Kinder, ya que esconden muchos secretos y nos llevaremos alguna sorpresa con ellos/as.
Pensaba que la protagonista indiscutible iba a ser Jimena, pero Victoria le roba el protagonismo con gran alegría para mí. Jimena se me ha atragantado un poco en este libro y no la he aguantado mucho, pero ha tenido su gracia. Creo que Jimena ha cambiado u ocurre algo con ella para que se comporte de esa manera tan insoportable hasta con su propia familia.
En cada capítulo me he dado cuenta de algo original y es que Tamara Marín se encarga de abrir nuevas tramas y cerrar otras. Es un no parar de sucesos, palabras, gestos, de divagaciones, de pensamientos. Con la música a otra parte es una bonita locura. La autora sabe cómo enganchar al lector, en que instante tocar la fibra sensible, en que instante hacernos reír, enfadarnos...
La autora ha sabido mezclar mundos diferentes, es decir: Leo es músico y Victoria intenta encontrar su sitio.
Leo y Victoria tienen más en común de lo que parece y ambos de miran a los ojos y se ven, se encuentran sin máscaras, ni cartón.
Me he dado cuenta de que en la novela vemos varias caras de los personajes. Vemos a Victoria familiar, en el amor, en la amistad, a Leo con sus fans, en fiestas...
Tamara nos muestra una novela poliédrica y con varias capas que iremos quitando.
No quiero meter spoilers, porque es fácil de hacerlo con este libro. He querido tocar algunas teclas o mis sensaciones...
Engancha bastante y tanto es asi que, ya estoy con el siguiente libro (Si, deja algunas cosas abiertas).
Tenía buenos pálpitos con esta autora y me siento feliz de haber dado una oportunidad a con la música a otra parte.